Un paseo por los antiguos hospitales universitarios, la ciudad médica de Alcalá de Henares

El profesor honorífico de la Universidad de Alcalá, Gonzalo Gómez, hace un recorrido por los hospitales que formaron parte de la red universitaria en época cisneriana

Se escucha crotorear a las cigüeñas, el fino aire de octubre mueve las hojas de los árboles de la plaza de San Diego y ahí, frente a la majestuosa fachada cisneriana diseñada por Gil de Hontañón, comienza nuestra visita a la ciudad médica de Alcalá de Henares de la mano de su investiador, Gonzalo Gómez, profesor honorífico de la Universidad de Alcalá.

Gonzalo comienza detallando que la Universidad, en la época de Cisneros, estaba formada por tres instituciones: el Colegio Mayor, las facultades, y la Catedral Magistral.

CINCO SIGLOS A LA VANGUARDIA MÉDICA

El Colegio Mayor y las facultades compartían un mismo espacio, el Colegio Mayor de San Ildefonso que es actualmente el rectorado. En el patio de Santo Tomás de Villanueva, es donde tenían lugar las clases de filosofía, Teología, Medicina y Derecho Canónico, todas en la planta de abajo. Donde actualmente se encuentra la tienda, se ubicaba la cátedra de medicina.

Patio StTomas

Los estudiantes accedían al edificio desde fuera porque vivían en casas particulares. Imaginemos a los jóvenes de la época con sus mantos, con sus togas, con sus libros bajo el brazo, corriendo en el patio para no llegar tarde a sus lecciones. Pero estos estudiantes tan lozanos también enfermaban.

UN HOSPITAL PARA ATENDER A LOS ESTUDIANTES ENFERMOS

Es por ello que, en las Constituciones de los Colegios de Pobres de 1514 y en las del Colegio Mayor de San Ildefonso, el Cardenal Cisneros ya establece que tiene que haber un hospital en el que los estudiantes se puedan curar. El primero de estos fue el de San Lucas y San Nicolás. Hasta él nos podemos acercar caminando desde la Universidad, puesto que actualmente es el palacio de los Casado que se encuentra en la plaza de Atilano Casado y que aún conserva el dintel original del hospital. Hasta él hemos llegado atravesando la Plaza de San Diego, la calle Libreros, caminando hasta el final de la calle del Tinte. 

Por sus ventanas, hoy tapiadas, se asomarían estudiantes, estudiantes enfermos, pero también estudiantes sanos que aprendían el oficio de curar al otro.

san lucas

En este hospital trabajó Francisco Vallés, más conocido como el Divino Vallés, estudiante y profesor de la Universidad de Alcalá. Vallés fue protomédico de Castilla y desarrolló toda su labor en la ciudad de Alcalá, donde aún hoy se pueden contemplar restos de la fachada de su casa en el actual hospital que lleva su nombre en la calle Santiago. 

Puerta Valles

Vallés fue médico de cámara del Rey y puso en práctica el conocimiento teórico de las clases que se impartían en los teatros anatómicos de los hospitales universitarios a los que se sumaron algunos más en la ciudad como el de Santa María La Rica o el de Antezana. Una red de hospitales que empiezan a distribuirse por patologías. Es el inicio de las especialidades médicas. A principios del siglo XVI solo existían médicos generales pero a finales del mismo siglo, ya había médicos especialistas: obstetras, urólogos o cardiólogos.

EL HOSPITAL MÁS ANTIGUO DE EUROPA

Así, continuando por el recorrido, nos volvemos a adentrar en el bullicio de la calle Mayor. Esta calle porticada se ensancha y ve la luz justo al llegar al hospital de Antezana, el hospital más antiguo de Europa, que se funda en 1483 por Luis Antezana e Isabel de Guzmán. En él, alrededor de su patio castellano, se atendía a pobres enfermos. Es el único de los hospitales antiguos de Alcalá de Henares que sigue en activo con un fin sanitario, siendo actualmente una residencia para mayores. 

Hospital de Antezana

Los pasos continúan por la empedrada calle Mayor hasta llegar a la Plaza donde se encuentra la Catedral Magistral, tan relacionada con la Universidad puesto que este nombre lo recibe porque todos sus sacerdotes tenían que ser magistri, doctores en Teología por la Universidad fundada por Cisneros.

SANTA MARÍA LA RICA, UN HOSPITAL UNIVERSITARIO

Pero antes de llegar a la Catedral, giremos por la calle que lleva el mismo nombre del antiguo hospital que visitaremos: Santa María la Rica, actualmente sala de exposiciones municipal. 

Santa María la Rica era un hospital que estaba preparado para atender a enfermos contagiosos por ejemplo de sífilis u otras enfermedades venéreas. 

Santa Maria La Rica

Este hospital, en 1513 pasa a ser administrado por el Colegio de San Ildefonso, determinando cuáles son los médicos y estudiantes que trabajarían en él.

Como bien dice el investigador y profesor honorífico de la Universidad de Alcalá, Gonzalo Gómez, "Alcalá de Henares fue una ciudad médica, en la que se establece un modelo de ciudad asistencial con una Facultad de Medicina que enseñaba e investigaba ya que sus estudiantes y profesores practicaban en los hospitales de la ciudad".

Comenzó así un completo sistema formativo universitario de dos años, ya que hasta entonces los médicos solo se formaban durante seis meses en un título de Artes y Filosofía, se incluyeron lecturas de autores griegos en el programa, se obligaba a hacer entre 10 y 12 disecciones parciales o totales para poder obtener el título de bachiller y se desarrolló un sistema de prácticas en estos hospitales.

Hasta ese entonces los enfermos iban a los hospitales a morir, pero esa dinámica cambia de la mano de la nueva corriente de pensamiento. Su lema en el campo de la medicina, Dignidad y técnica, cambió para siempre el rumbo de esta disciplina al entender que su objetivo era ayudar a los enfermos a recuperar su dignidad.

Publicado en: Reportaje