Los desafíos de dirigir una editorial universitaria

El profesor Gregorio Sánchez sustituye a Pedro Sánchez-Prieto como director en esta nueva andadura de la Editorial Universidad de Alcalá

Desde el pasado mes de junio, Gregorio Sánchez Marín ocupa el cargo de director de la Editorial Universidad de Alcalá, sucediendo a Pedro Sánchez-Prieto. “El equipo y Pedro me están facilitando mucho la transición y la colaboración ha sido máxima”, asegura Gregorio, que afirma estar integrado al 100% en este nuevo puesto, al que categoriza como “amable”, tras un periodo de aprendizaje. “El trabajo que se ha hecho hasta ahora es encomiable y mi objetivo es seguir manteniendo esa posición y consolidar la Editorial Universidad de Alcalá como una editorial de prestigio en el ámbito académico”, apunta.

Gregorio Sánchez es catedrático de Organización de Empresas en el Departamento de Economía y Dirección de Empresas de la Universidad de Alcalá y ha sido subdirector de la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación (ANECA). Pasar de la vida académica y docente al cargo de director de la Editorial de la Universidad de Alcalá, ha sido “todo un privilegio”, afirma. Una editorial acorde con el tamaño de la UAH pero muy bien posicionada en el ámbito nacional.

“El objetivo principal de una editorial académica es democratizar el conocimiento, tanto docente como investigador, que se genera en las instituciones universitarias”, explica Sánchez. Y es que la editorial no solamente publica resultados de investigación, sino que también pone a disposición de la comunidad distintos textos universitarios como los manuales de cualquier rama de conocimiento.

En este sentido, Gregorio se propone potenciar colecciones de divulgación científica divulgativa en distintos formatos para cumplir ese objetivo del plan estratégico de la universidad: transferir el conocimiento.

UN PROCESO DE PUBLICACIÓN RIGUROSO, ESTANDARIZADO E INDEPENDIENTE

La Editorial Universidad de Alcalá está abierta a cualquier solicitud de cualquier académico, no solo de la UAH. El proceso de publicación es riguroso, estandarizado e independiente. Como explica el director, tras la solicitud de publicación del autor en la web, el primer paso consiste en una revisión técnica para comprobar que la obra cumple una serie de requisitos mínimos. “A partir de ese momento, intentamos clasificar la obra, monografía o colectiva, en las colecciones disponibles. Una vez aceptada, el Consejo Asesor de la editorial, formado por prestigiosos académicos en las diferentes ramas de conocimiento, toma una decisión inicial que puede ser favorable o no. En caso de ser favorable, la obra es valorada por dos expertos externos independientes de forma anónima. En función de su evaluación, el consejo asesor toma la decisión final de publicar o no la obra”.

En cuanto a los objetivos que Sánchez se ha propuesto para su mandato, se encuentra el de posicionar lo más arriba posible a la Editorial de la UAH en la herramienta Diamax, creada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT) para evaluar el desempeño de las editoriales universitarias.

A ello se une el proyecto de impulsar el portal de revistas electrónicas, algo que promovió el anterior director y que “está siendo un éxito ya que muchas de las revistas de la editorial están muy bien posicionadas en los en los rankings internacionales de Scopus o Wos”, afirma Gregorio Sánchez. “Hasta ahora tenemos 12 revistas electrónicas con posibilidades de seguir aumentando y apoyando financieramente. Sobre todo, nos gustaría potenciar las de ámbito científico”, afirma el actual director. Estas tienen sus propios comités editoriales y consejos de redacción, pero la editorial de la UAH les ofrece soporte en los procesos de revisión y edición de artículos a través de la plataforma de acceso abierto Open Journal System.

Además, otro de los objetivos está relacionado con la Ciencia Abierta. “La Unión Europea quiere potenciar el acceso a la investigación en abierto y en gratuito. Nosotros como editorial de una universidad pública, estamos comprometidos con esa idea”, afirma el director, que tendrá que optimizar los recursos para ello. Actualmente, las revistas de la editorial son de acceso abierto y se quiere extender a otro tipo de publicaciones como las monografías o las obras colectivas, pero también a manuales docentes. “Hay muchos profesores que tienen sus apuntes, pero no acaban de animarse a publicarlos, aunque sería de mucha ayuda para los estudiantes”, afirma.

LIBRO EN PAPEL VS DIGITAL

Las editoriales universitarias también han tenido que digitalizarse. “Es verdad que cada vez se venden menos libros en papel, pero en la Editorial de la Universidad de Alcalá hay espacio para para el libro físico y la edición tradicional, pero hay que compatibilizarlo con los cambios en el entorno. La digitalización y el acceso abierto han venido para quedarse”, afirma Gregorio Sánchez. Ambos formatos, tienen ventajas y desventajas, y la elección entre uno u otro depende de las necesidades y preferencias del lector. El libro en papel sigue siendo muy valorado por su experiencia táctil y su durabilidad, mientras que el libro digital ofrece mayor accesibilidad, portabilidad y la capacidad de incluir recursos multimedia interactivos. “Dependiendo del tipo de obra y del presupuesto, nosotros orientamos a que obra se publique en un formato u en otro”, explica Sánchez.

Publicado en: Reportaje