‘Cien años de soledad’: 50 años como paradigma de la novela del siglo XX

Se acaba de conmemorar el 50 aniversario de la publicación de ‘Cien años de soledad’, considerado como uno de los grandes referentes de la novela del siglo XX. En esta información el profesor de la UAH, Paul Quinn, analiza la trascendencia de un libro paradigmático, una de esas ‘obra entre las obras’, única para cada lector y universal para el mundo de la cultura.

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Paul Quinn

¿Por qué, cómo ha conseguido ‘Cien años de soledad’ convertirse en tan solo medio siglo desde su publicación en una referencia literaria a nivel mundial? Hay muchas razones –dice el profesor Quinn- y la primera de ellas es que es una amalgama de distintas historias y procesos. ‘Y es que se puede leer como si fuera una novela histórica, ambientada en la Colombia del siglo XIX y la primera mitad del siglo XX o en la Hispanoamérica de la misma etapa. Tiene también una lectura mítica, una reescritura paródica de la génesis bíblica, y una reflexión sobre los mitos fundacionales de Latinoamérica; pero también es una novela sobre las técnicas de escritura y la lectura…Cuando leemos que Melquíades descifra los pergaminos es cuando acaba la novela, pero empieza la escritura de la misma, como si estuviéramos en un bucle interminable’, opina el profesor. Y también es una novela universal sobre la condición humana y sobre la soledad del ser humano. ‘Se descifra por completo la naturaleza del ser humano, con sus miserias y sus grandezas’. Pero, sobre todo, se puede leer y releer y el texto es siempre ‘un deleite infinito’, agrega el experto de la UAH.

La historia, la política, los movimientos sociales aparecen entretejidos en una obra que, sin duda, también es una lección magistral de literatura en la que se trasluce Cervantes, la cultura maya o la tradición literaria hispanoamericana, llena de barroquismo, melancolía y realismo mágico.
García Márquez nunca pensó que ‘Cien años de soledad’ fuera a ser su novela más universal. Él llegó a decir que ‘odiaba’ esta obra, tal vez porque el éxito descomunal de la historia legendaria de la familia Buendía ha solapado otros trabajos tan o más brillantes, como ‘El amor en los tiempos del cólera’. Quinn opina lo mismo: ‘García Márquez volcó toda su pasión, toda su imaginación y todo su arte literario en ‘Cien años de soledad’ y lo demás, tanto lo previo como lo posterior, no ha obtenido el éxito global. Lo demás ha quedado eclipsado por los más de 60 millones de lectores que tiene este libro’.

Para Quinn hay varios factores que influyen en la difusión de esta obra maestra, publicada en la década de 1960, cuando la globalización era todavía ‘futuro galáctico’. ‘Creo que las editoriales españolas jugaron un papel decisivo. García Márquez, y también Cortázar o Carlos Fuentes, entraron en Europa vía España. Igual ocurrió con Rubén Darío y el modernismo o el vanguardismo de Huidobro’. Pero el caso de ‘Cien años de soledad’ provocó un antes y un después en las influencias literarias de uno y otro lado del Atlántico. ‘Hasta ese momento era la literatura, la cultura española, la que viajaba a Hispanoamérica y se sometía a una especie de ‘transculturación’ hasta adoptar una nueva forma; en este caso, se produce un viaje de vuelta, las influencias viajan desde la otra orilla provocando igualmente un influjo profundo en la literatura española y europea en general. ‘Cien años de soledad’ hace que la literatura hispanoamericana deje de ser periférica y empiece a codearse con la literatura norteamericana y europea’, agrega.

La década de los 60-70 es la etapa del ‘boom’ latinoamericano, la eclosión del realismo mágico que todo lo puede, pero la repercusión que tuvo ‘Cien años de Soledad’ no es, ni de lejos, equiparable a la de ninguna otra obra literaria latinoamericana coetánea. Comparten esplendor con ésta ‘Pedro Páramo’, de Juan Rulfo; ‘Rayuela’, de Julio Cortázar; ‘La ciudad y los perros’, de Vargas Llosa; ‘La muerte de Artemio Cruz’, de Carlos Fuentes…Todas ellas salieron a la luz con muy pocos años de diferencia y con un gran éxito de lectores pero el impacto y la influencia de la de García Márquez fue mayor, ‘es como si hubiera ganado la Champions’, estima Quinn. Y la clave es precisamente su capacidad para influir no solo en la creación literaria de su entorno más próximo sino en otras literaturas, como la europea o la norteamericana. García Márquez se convierte en un genio entre los genios porque construye ‘un clásico moderno, como lo es ‘El Quijote’, indestructible en el tiempo y en el espacio; una novela con muchos niveles de lectura que uno lee y relee y en la que siempre hay un nuevo descubrimiento’, concluye.

 

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