La Universidad de Alcalá presenta los resultados de BEGIN, un proyecto internacional que ayuda a las pymes a integrarse en el blockchain
La Universidad de Alcalá (UAH) ha venido trabajando, durante los últimos tres años, en la elaboración de un plan formativo para emprendedores sobre la temática de blockchain y su posible uso y aplicación en la pequeña y mediana empresa. Se trata del proyecto BEGIN, una propuesta dentro del programa Erasmus+ de la Unión Europea, en el que la UAH participa junto a entidades de Reino Unido, Irlanda, Dinamarca y Estonia.
Hasta el momento, el consorcio de BEGIN ya ha diseñado y probado el modelo de formación para facilitar el acceso de formación gratuitamente para que las pymes integren este conocimiento a su empresa. Ahora el programa queda libre y a disposición de quien lo considere útil para formarse y utilizarlo en formación reglada.
Como parte final del proyecto, las entidades participantes han organizado diferentes eventos para presentar sus resultados. Así, el próximo 24 de noviembre, en el espacio Caixabank Day One de Madrid, la Universidad de Alcalá ha programado presentaciones, una mesa redonda y acciones de networking con los ponentes y emprendedores en materia de blockchain.
Tecnología blockchain
Las pymes son la columna vertebral de nuestras economías: representan el 99 % de las empresas en buena parte de Europa y crean el 85 % de los nuevos puestos de trabajo. Sin embargo, el entorno empresarial está cambiando rápidamente, sobre todo debido a los avances en la tecnología digital.
Como explica el representante de la Universidad de Alcalá en el proyecto BEGIN, Salvador Sánchez, profesor de Lenguaje y Sistemas Informáticos, 'el blockchain, traducido como cadena de bloques en español, es una tecnología de base de datos donde la información se almacena en bloques enlazados que forman una cadena, de ahí el nombre. Esta base de datos está compartida y todos los que participan tienen acceso a la misma, de tal modo que cualquiera de ellos puede rastrear cada transacción que haya realizado. Además de esto, hay dos características muy importantes que definen a esta tecnología: el uso de criptografía, que le aporta una gran seguridad, y la descentralización, que significa que nadie tiene poder sobre la cadena de bloques en el sentido que por ejemplo un banco tiene siempre una autoridad sobre las cuentas y las transacciones que yo realizo, por ejemplo, puede limitar el dinero que yo transfiero al día o imponer otras restricciones o pagos por operativa. Y en la cadena de bloques no hay ninguna autoridad central'.