La Universidad de Alcalá participa en el proyecto Tremors desarrollando una tecnología pionera para detectar movimientos sísmicos marinos
Durante los tres años de duración del proyecto de investigación, los miembros del consorcio formado por la Universidad de Alcalá, Repsol, Aragón Photonics Labs y el Instituto de Ciencias del Mar del CSIC, diseñarán un sistema de medición formado por un equipo interrogador conectado a un cableado de fibra óptica submarino que actúa como una matriz lineal de miles de sensores.
La Agencia Estatal de Investigación (AEI) ha impulsado este nuevo proyecto que, por su carácter innovador, ha sido seleccionado en el programa Proyectos de I+D+i en Colaboración Público-Privada del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia financiado por los fondos Next Generation de la Unión Europea.
La Universidad de Alcalá participó con algunos de estos socios en un proyecto anterior en el que el objetivo fundamental era vigilar la infraestructura de cable submarino y protegerlo ante amenazas de barcos, sobre todo de ataques de rastreros que pudieran dañar el cableado. En cambio, este nuevo proyecto se encarga de desarrollar todo el sistema, tanto de mejora del hardware, como de procesar los datos que se adquieren con la tecnología desarrollada en la Universidad de Alcalá que detecta sismicidad baja en el fondo marino. El sistema de medición está formado por un equipo interrogador conectado a un cableado de fibra óptica submarino que actúa como una matriz lineal de miles de sensores y, para la monitorización de los datos en alta resolución y en tiempo real, así como para su análisis, los socios contarán con avanzados sistemas de computación y diseñarán algoritmos de inteligencia artificial para su análisis que, en el caso de Repsol, le servirá para monitorizar sus infraestructuras offshore en alta mar.
'A diferencia del proyecto anterior, la tecnología de medida que está desarrollando la Universidad de Alcalá sirve para detectar movimientos sísmicos de baja intensidad, por debajo de la escala de uno, por lo que estamos haciendo modificaciones para aumentar la sensibilidad de los aparatos y que detecten este tipo de eventos' afirma la investigadora principal del proyecto Sonia Marín López, del departamento de electrónica de la Universidad de Alcalá.
Publicado en: Reportaje