Los nuevos doctores industriales se forman en Alcalá

La Universidad de Alcalá es una de las pocas Universidades que han tenido la posibilidad de ofrecer a sus doctorandos el nuevo Plan de Acción para Doctorados Industriales en España que permite a los estudiantes participar en un proyecto de investigación industrial o experimental en una empresa o Administración Pública que esté directamente relacionado con su tesis

En España, el número de puestos de trabajo en empresas innovadoras es un 60% inferior a la media europea según el European Innovation Scoreboard; y el gasto en I+D del sector empresarial es la mitad que en el resto del continente.

Faltan en nuestro país empresas interesadas por generar conocimiento y faltan puentes que conecten a los universitarios con la innovación privada. Una carencia de la que se salvan iniciativas que ya han empezado a dar  frutos, como los doctorados industriales, en cuya implantación está teniendo un papel decisivo la Universidad de Alcalá (UAH).

La historia de Almudena Naharros y Francisco Javier Palomero es un ejemplo de ello. Son dos estudiantes de la Universidad de Alcalá que están desarrollando el doctorado con mención industrial en Berlimed, una planta farmacéutica, con sede en Alcalá de Henares, de la multinacional Bayer. En esta empresa están desarrollando medicamentos y complementos alimenticios en cápsulas blandas, más innovadoras y sostenibles, que mejoren la experiencia del consumidor, centrándose para ello en su composición polimérica.

El doctorado con mención industrial comenzará en la convocatoria 2024-2027 pero la Universidad de Alcalá es una de las universidades escogida para desarrollar el proyecto piloto. La característica de esta formación es que el doctorando participa en un proyecto de investigación industrial o de desarrollo experimental en una empresa o Administración Pública (excepto universidades) directamente relacionado con la tesis que está desarrollando ligada a cualquiera de las ramas de conocimiento. Además, la dirección de la tesis se hace conjuntamente entre la empresa de destino y la universidad de origen.

El objetivo de esta nueva formación es transferir el conocimiento desde el ámbito científico al entorno económico social para reforzar sus capacidades de I+D+i y mejorar la empleabilidad de los investigadores. Como apunta Javier, la diferencia con un doctorado convencional es "el objetivo principal de la tesis, la cual no va enfocada principalmente a la publicación y divulgación científica, sino que busca generar propiedad intelectual que pueda ser protegida por patentes y por lo tanto explotado por una entidad privada como es la empresa". Además, el lugar de trabajo pasa de ser un ambiente universitario a combinarlo también con el entorno más puramente laboral en el que, como afirma Almudena, "desarrollas otro tipo de habilidades blandas como colaboración, trabajo en equipo o liderazgo".

Como afirma Javier, estar inmersos en este programa "nos aporta un crecimiento personal y laboral muy completo gracias a que este tipo de tesis se diseñan para explotar al máximo el conocimiento, los recursos existentes y el tiempo para desarrollarla".

En un futuro, al acabar la tesis, a los dos estudiantes les gustaría seguir desarrollándome en el ámbito empresarial para poner en práctica todo lo aprendido. "No queremos que esto acabe cuando se presente la tesis, sino que continúe avanzando y desarrollándose" puntualiza Francisco Javier.

Publicado en: Reportaje