Un proyecto liderado por la UAH ha sido nominado al Premio Nacional de Arqueología y Paleontología de la Fundación Palarq
Gersande Eschenbrenner es la directora de Medjehu, un proyecto multidisciplinar que analiza los restos arqueológicos de madera del Antiguo Egipto para investigar las redes socioeconómicas asociadas al oficio de la madera en esta época.
- ¿En qué consiste el proyecto?
- Medjehu significaba carpintero en el Antiguo Egipto y es un proyecto global de investigación que dirijo desde hace cinco años en el que trabajamos diez especialistas internacionales de distintas áreas, junto con egiptólogos, analizando la madera del Antiguo Egipto desde el milenio tercero hasta el primero antes de Cristo.
La madera ha sido muy usada en Egipto y se ha conservado muy bien por la sequedad de las condiciones ambientales del país. Gracias a su buen estado, hemos podido estudiar cómo se utilizaba, de dónde provenía y cómo funcionaba el comercio de la madera, un material que era utilizado por todos los estratos de la sociedad, de las élites al pueblo, y se utilizaba tanto para la vida cotidiana como para formar parte el ajuar funerario. De esta forma, gracias a nuestra investigación, centrada en una misma época, podemos redibujar el paisaje histórico, económico y social del Antiguo Egipto.
- ¿Con qué dificultades os habéis encontrado?
- Como todos los proyectos de investigación, necesitamos financiación para continuar. El grueso del proyecto está sostenido por el patrocinio privado, por lo que ganar este premio sería una oportunidad para continuar trabajando.
El proyecto Medjehu es un proyecto a largo plazo. Para reunir la mayor cantidad de datos posible y poder hacer un análisis detallado de las redes económicas y sociales de la madera, el equipo tiene que seguir investigando en diferentes misiones de campo en Egipto, pero también en numerosas colecciones de museos de todo el mundo.
- ¿Qué papel tiene la Universidad de Alcalá en este trabajo?
- Yo trabajo como investigadora María Zambrano en la Universidad Alcalá junto con otros investigadores de la UAH, por ejemplo, con el profesor Carlos Gracia Zamacona, que descifra los textos egipcios en el proyecto MORTEXVAR, así como con Antonio Morales, uniendo nuestras especialidades.
El equipo aplica un enfoque multidisciplinar al estudio de cada objeto que incluye: la arqueología, la arqueometría con el análisis sistemático de las especies de madera (locales e importadas), así como el estudio de los pigmentos y resinas, el estudio de las técnicas de fabricación y los criterios estilísticos utilizados, y un estudio epigráfico de cada objeto inscrito.
- ¿Cuáles han sido vuestros grandes hallazgos dentro de esta investigación?
- A menudo encontramos material roto y gracias a ello podemos hacer muchos análisis. En una necrópolis real del periodo del Reino Nuevo en Luxor, en los Wadis occidentales (Universidad de Cambridge/NKRF), encontramos tumbas de esposas reales y de hijos e hijas reales fechadas en el reinado de Amenhotep III. Estaban muy destruidas, pero la madera, sobre todo de cedro importado del Líbano, se había conservado fantásticamente y estaba ricamente decorada. Gracias a este descubrimiento, pudimos descubrir ajuares funerarios de este periodo real, que nos eran desconocidos.
También en la necrópolis tebana de Deir el-Medina, durante una misión del Instituto Francés de Arqueología Oriental de El Cairo, descubrimos un ataúd datado en el periodo inmediatamente posterior al reinado del faraón Akenatón. Este ataúd había desaparecido hacía varios años. Aunque su descripción aparece en todas las publicaciones relacionadas con este periodo por su particular decoración, no sabíamos dónde estaba y lo encontramos en una sala de un almacén de conservación. Cuando lo vimos, lloramos de emoción. ¡Es una fuente de conocimiento única!
Tendremos que esperar la lista de los 6 finalistas y la final, que se celebrará el 11 de junio, para saber si este proyecto de la Universidad de Alcalá es el ganador.
Publicado en: Entrevista