La UAH presenta el Observatorio de la Huella de Carbono

Más del 70% de los de Gases de Efecto Invernadero (GEI) que provocan el calentamiento global son debidos al transporte, la comida y la climatización del hogar. Estas emisiones son la denominada huella de carbono (HC) y, para ser conscientes de nuestra responsabilidad y mejorar nuestros hábitos, la Cátedra de Ética Ambiental Fundación Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno-Universidad de Alcalá presentó el jueves, 18 de junio, el Observatorio de la Huella de Carbono que calcula cuál es nuestra HC personal. Emilio Chuvieco, Catedrático de Análisis Geográfico Regional en el Dpto. de Geología, Geografía y Medio Ambiente de la UAH y Director de la Cátedra y Mario Burgui, Investigador de la misma, nos detallan esta herramienta. 

- ¿Qué diferencia este observatorio de otros? ¿Cuáles son los objetivos de su creación?

En la Cátedra de Ética Ambiental nos hemos propuesto impulsar la conexión entre dos de los ODS de Naciones Unidas, la Acción por el Clima y el Consumo Responsable, por lo que se podría decir que este observatorio persigue dos objetivos principales: facilitar la información necesaria para que las personas sean más conscientes de las emisiones de GEI de sus hábitos cotidianos y, en consecuencia, puedan tomar decisiones que ayuden a reducirlas.

En el diseño del observatorio hemos pretendido superar las deficiencias de otros muchos existentes hasta la fecha. Para ello, se revisaron más de 60 sitios web similares y calculadoras online en diferentes lenguas, analizando los pros y contras de cada una. A su vez, tuvimos en cuenta las últimas revisiones sistemáticas, análisis y recomendaciones de buenas prácticas realizadas por otros autores.

- ¿Cuál es la media de emisiones que genera una persona de mediana edad al día? ¿Cuándo se considera baja u alta?

Es interesante diferenciar entre las emisiones promedio de un ciudadano español, considerando el total de emisiones producidas en el país, y las derivadas de nuestro consumo. Las primeras las podemos obtener de los datos del Ministerio de Transición Ecológica, que cuantificaba al final de 2018 en unos 333 millones de toneladas nuestras emisiones: esto es unas 7 toneladas de CO2 equivalente por persona, el CO2 equivalente es una unidad que estandariza las emisiones de todos los gases con efecto invernadero, en comparación con la del CO2, que se toma como unidad de referencia. En nuestro observatorio, estimamos las emisiones de lo que consumimos, que en muchos casos corresponde a productos fabricados en otros países. Aunque aún no tenemos datos definitivos, con nuestros cálculos actuales estamos más cerca de 8.5 toneladas de CO2e, unos 22 kg al día, casi un 20% más de lo que podría deducirse de los informes del Ministerio.

No obstante, es importante indicar que nuestra estimación se basa en los datos que han incluido los usuarios de la calculadora, hasta ahora adultos y jóvenes de al menos 16 años. Nuestra calculadora, cada vez que un usuario inserta nueva información, procesa y recalcula automáticamente la media nacional, además de las medias correspondientes a distintas agrupaciones de personas por sexo, edad, nivel de estudios, ocupación y lugar de residencia. Esto permite revisar si las emisiones personales son más altas o bajas que la media de su grupo en las distintas secciones de la calculadora, comida, transporte, ropa, etc., y así facilita las comparaciones que pueden ayudar a los usuarios a ser más conscientes de en qué ámbitos deberían hacer algún esfuerzo para reducir esas emisiones. Más que decir que las emisiones de una persona son altas o bajas en general, es mejor indicarlo de forma relativa, es decir, comparando en función de una u otra variable de las indicadas.

- ¿Hay diferencias entre países? ¿Cuál es el país que más HC produce y cuál menos?

Sí, hay diversos rankings a nivel internacional que lo miden. Comparando las emisiones por persona, los valores más altos están en EE.UU., Canadá, Australia, y algunos países del golfo pérsico. China tiene emisiones per capita parecidas a las europeas.

Emilio Chuvieco y Mario Burgui
Delante, Emilio Chuvieco y Burgui, detrás

- ¿Qué productos son los que más huella de carbono producen?

Depende de dónde pongamos el foco. Lo ideal es comparar dentro de la misma categoría. Pero también es interesante saber en qué facetas de nuestra vida tenemos un mayor o menor impacto, por esto en el Observatorio hemos facilitado la opción de hacer distintos tipos de comparativas y el usuario puede descargarse un informe con resultados y recomendaciones personalizadas para su caso.

Es evidente que el transporte tiene gran peso, pero todo tiene una huella de carbono. En focus groups que realizamos con consumidores para un estudio anterior enfocado en productos alimentarios, era sorprendente ver cómo casi ninguno de ellos se esperaba que la alimentación tuviera una huella de carbono tan alta, entre el 10-30% del hogar, que en general aumenta cuando se trata de un alimento procesado y más aún si viene de lejos.

En resumen, aunque el problema es global, las responsabilidades son también personales, y nuestra aportación personal es muy necesaria.

- Algunas compañías aéreas muestran qué huella de carbono producirá tu viaje y ofrecen pagar un donativo para paliar la situación, por ejemplo, con la plantación de árboles, ¿qué más sectores ofrecen esta opción? ¿Es suficiente para remediar el rastro de la HC?

La lista de sectores que informan sobre la huella de carbono de su actividad y ofrecen formas de compensarla está aumentando. Hace más de una década que se pusieron en marcha otras iniciativas como el etiquetado de productos en supermercados, indicar el CO2 correspondiente a nuestra compra en el ticket, etc. Son distintas vías que tienen su utilidad desde el punto de vista de la información y, posteriormente, de la sensibilización del consumidor, pero que antes que a compensar la huella, deberían llevar a reducirla. En este sentido, desde la Cátedra estamos impulsando que se etiquete la huella de carbono de los productos que compramos y pensamos que sería una buena iniciativa incluir en la nueva Ley de Cambio Climático que está estudiando el Congreso de los Diputados. Sería una manera de ser más conscientes del impacto que tiene lo que consumimos. En nuestro ámbito, primero hay que apostar por la reducción de emisiones y después compensar aquellas que no haya sido posible evitar.

- Con la información que vamos teniendo, ¿creen que en un futuro cambiará nuestra forma de consumo?

Los hábitos de consumo dependen de muchos factores, lo cual es precisamente una de nuestras líneas de trabajo actuales en relación con la huella de carbono. No siempre la variable ambiental, o climática en este caso, es la que los consumidores tienen en cuenta en primer lugar. Otros factores como el precio y diversas motivaciones influyen mucho. Pero además, hay que tener en cuenta que hay muchos tipos de consumidor, y esta tipología está en constante cambio, más aún en nuestros días.

Publicado en: Entrevista