Carlos Alvar, filólogo de la UAH: 'Dante Alighieri es el poeta de la luz'
Este año se celebra el 700 aniversario del fallecimiento del poeta italiano, autor de la Divina Comedia. La proyección y difusión de su obra continúa en la actualidad, la cual ha sido estudiada por el profesor del departamento de Filología, Comunicación y Documentación.
Dante Alighieri permanece entre nosotros. Su obra, siendo la Divina Comedia el culmen de la literatura medieval, mostró las particularidades y posibilidades del italiano como una lengua que expresaba belleza y sensibilidad en cada uno de sus versos. Tal y como reconoce Carlos Alvar, catedrático del departamento de Filología, Comunicación y Documentación: "Es un poeta extraordinario e inevitable que marca un punto de inflexión entre la Edad Media y el naciente Humanismo. Es el centro de todas las tradiciones culturales y literarias que hay en Italia en ese momento".
Este año se cumple el 700 aniversario del fallecimiento de Dante, una vida llena de creación, estudio, reflexión y política. Nacido en Florencia en 1265, el toscano perteneció al círculo de stilnovistas integrado por Guido Guinizelli, Guido Cavalcanti, Cino da Pistoia y Dino Frescobaldi, quienes marcaron las influencias literarias de los siglos XIII y XIV. Entre las obras del autor, destaca Vida nueva, publicada en 1293, además de otras de carácter social o político como El convite, Sobre la Monarquía y Sobre la lengua vulgar, hasta que en 1304 comienza a escribir la Divina Comedia. "Dante es consciente de su papel como autor así como de su superioridad intelectual, la cual le permite experimentar poéticamente con el estilo stilinovista en su primera etapa, luego, desarrollar la Vida nueva y, finalmente, romper con todo lo anterior cuando elabora la gran obra que es la Divina Comedia. Sin esta última, a lo mejor no hubiera sido tan importante".
El Infierno, el Purgatorio y el Paraíso. Esos son los tres escenarios por los que pasea Dante, acompañado de Virgilio, hasta deshacerse de sus pecados y ascender a los cielos junto a su amada Beatriz, un personaje que representa a una joven dama de la alta aristocracia florentina de la que se enamoró apasionadamente en vida. Para ella, inventó los tercetos, estrofas de tres versos endecasílabos que componen cada canto, los cuales Carlos Alvar describe de "una transparencia y fuerza enorme; cada verso, cada palabra, está perfectamente calculado. Es maravilloso". Como decía el escritor argentino Jorge Luis Borges en una de las conferencias dadas acerca de esta arquitectura literaria, la Divina Comedia da lugar a una lectura múltiple dependiendo del acercamiento del lector, que la puede tomar en un sentido literal como alegórico, dándole a Dante la figura de persona terrenal, a Beatriz la fe y a Virgilio la razón.
Monumento a Dante Alighieri, en Florencia |
El filólogo une a Petrarca, Boccaccio y Dante como la tríada esencial para la difusión del toscano como lengua literaria, marcando la senda a las futuras generaciones que quisieran obtener relevancia en la poesía y en la narración. Otra característica que resalta del estilo del florentino es la capacidad de expresar lo inexpresable, "hablar de lo inefable". La relevancia y perdurabilidad del escritor tras siglos lo demuestra el profesor Alvar con unas palabras que resumen lo indescriptible: "¿Quién es capaz de hablar del cielo sin haber estado en el cielo? Los místicos, suponemos, porque los demás inventamos movidos por imágenes preexistentes. San Juan de la Cruz puede hablar de esas visiones. Dante, un poeta magnífico, es capaz de describir el cielo y los tormentos del infierno, del que uno es capaz de exagerar lo malo conocido, ¿pero lo bueno? Es luz. Es el poeta de la luz. Esas felicísimas ideas que lo llevan de la mano de Virgilio, de san Bernardo, de Beatriz, y que le permiten entablar diálogos breves en apenas tres o cuatro frases cargadas de significado".
La labor del humanista Boccaccio contribuyó a la difusión de la obra
Hija de su tiempo, la Divina Comedia alude a múltiples detalles con relación a la sociedad y las vicisitudes que enfrentó el poeta. Por esta razón, el humanista Giovanni Boccaccio, gran seguidor y principal impulsor de la difusión de sus libros, se propuso que Dante no quedara en el olvido. "Boccaccio copió varias veces la Divina Comedia para distintas personalidades del momento y, así, se convirtió en uno de sus principales comentaristas junto a los hijos del propio Dante, al estilo de lo que sucedió con Virgilio u Ovidio, grandes autores de la Antigüedad, por lo que rápidamente se convirtió en un clásico”, explica Alvar, “es una historia muy minuciosa con múltiples referencias biográficas de las que uno tiene que estar muy empapado para entenderlas bien, de ahí las ediciones anotadas".
La figura del italiano la conoce bien de cerca Carlos Alvar, quien tradujo su biografía en Vida de Dante, hecha por Giovanni Boccaccio y publicada por Alianza, y escribió el prólogo de La vida nueva en ediciones de Siruela y de la Divina Comedia en Alianza. Al leer sus líneas, recuerda con impresión el primer encuentro entre Dante y Beatriz y la historia de amor que los circunda, "ese juicio al final de la Vida Nueva en el que Dante tiene un momento de debilidad y se dirige a otra dama, pero al final es Beatriz la elegida, a quien le escribirá una obra digna de ella".
Miembro de la Accademia delle Scienze di Torino y de la Österreichische Akademie der Wissenschaften, en Austria, el experto en Filología Románica pone la vista en la publicación de su más próximo proyecto: el décimo segundo volumen de la Gran Enciclopedia Cervantina. El investigador subraya la importancia de tener un temario en la educación temprana donde se estudien los más grandes literatos, y en especial, Miguel de Cervantes, ya que "en Italia, hay una gran tradición en el estudio de los clásicos, no hay italiano que no haya leído la Divina Comedia, mientras que aquí podríamos preguntarnos si hay un español que se haya leído el Quijote. Si tienes una gran figura, se ha de cultivar para que siga creciendo". La UAH en este sentido cuenta con el profesor Carlos Alvar para seguir predicando la palabra de Dante entre la comunidad universitaria, además del próximo Trabajo de Fin de Grado (TFG) que tutorizará comparando al autor con el escritor provenzal Matfre Ermengau. Una aportación a su legado.
Publicado en: Entrevista