Jambrina enseña en la UAH cómo escribir una novela histórica
Es profesor de Literatura en la Universidad de Salamanca y es también un reconocido escritor que, con su primera novela, ‘El manuscrito de piedra’, ha sido galardonado con el V Premio Internacional de Novela Histórica Ciudad de Zaragoza. Luis García Jambrina ha abierto el ciclo de talleres de autor que organiza la Escuela de Escritura de la UAH.
En el taller de autor Jambrina ha contado cómo es el proceso creativo de una novela histórica y cuáles son los ingredientes para que sea atractiva para los lectores. Para ello, ha explicado la trayectoria creativa de su primera obra. 'El manuscrito de piedra', un homenaje al humanismo, a Fernando de Rojas y a Salamanca.
Luis García Jambrina es el autor de 'El manuscrito de piedra' |
-¿Es difícil escribir una novela?
-Bueno, yo sólo puedo hablar de la trayectoria de mi novela y es cierto que es complejo. Antes había publicado dos libros de cuentos, y el segundo ‘Muertos S.A.’, dio origen a ‘El manuscrito de piedra’. En ese libro hablaba de enigmas literarios: la autoría del Lazarillo de Tormes, la muerte de Unamuno, la posible autoría de El Quijote por parte de un historiador arábigo... Estos cuentos fueron muy apreciados por los lectores y pensé en hacer algo con Fernando de Rojas, un personaje que me había fascinado desde la adolescencia. Hay un doble enigma en él: el enigma de la autoria de La Celestina y si hay dos autores o fue él o fue el otro quien escribió la obra, y luego está el propio personaje de Rojas, del que solo conocemos los últimos años de su vida, si es que es él. No sabemos nada más. Por otra parte, hay otro dato que me interesaba: su condición de converso. Daba mucho juego para hacer un retrato de la época. Empecé a trabajar sobre Rojas y las cosas se fueron haciendo más complejas y lo convertí en una novela sin pretenderlo. Estamos hablando de la época de Rojas, finales del siglo XV, muy turbulenta, de muchos cambios, de los Reyes Católicos y del inicio de la unificación de España, del descubrimiento del nuevo mundo y también es el comienzo del esplendor de Salamanca y todo va de la mano junto a la construcción del espacio, de un lugar como Salamanca, que yo conozco tan bien y que tiene grandes dosis de leyenda y enigma.
-¿Cómo se indaga en las fuentes dentro del proceso creador?
-Por un lado está el proceso de escritura y por otro el proceso de documentación. No me gusta llamarlo investigación. El hecho de estar familiarizado con la investigación, con la literatura de la época, con los espacios, con la ciudad, todo eso ha sido muy importante. Yo hablo del método de la inmersión histórica: no se trata de documentarse o de investigar, se trata de sumergirse en esa época. Es un proceso trabajoso el tener que alternar escritura y documentación. Tras el primer borrador de la novela hay un proceso de reescritura muy importante, porque tienes que atender al rigor narrativo, porque antes que nada esto es una novela que tiene vocación literaria, y luego viene el rigor histórico. ¿cómo combinar ambas cosas sin que una se coma la otra?. Para mí lo más importante es el rigor narrativo, siempre digo que en la novela histórica lo de histórica es un adjetivo y el adjetivo no se puede comer el sustantivo.
-Y bueno, ha escrito su primera novela y ya ha sido galardonada
-Sí, la novela ha obtenido el premio internacional más prestigioso de novela histórica ya publicada. El premio ayudó mucho a dar un nuevo impulso, pero es cierto que también funcionó muy bien el boca a boca.
-¿Por qué cree que se lee tanto la novela histórica?
-Estadísticamente es el género que más interesa. Conocer el pasado es una manera de conocer mejor nuestro presente. También creo que hay una sed de historia en España. Hasta hace pocos años, por las circunstancias particulares de este país, había como una amnesia, no interesaba la historia, no teníamos unas relaciones naturales con nuestra historia, o la idealizaban unos o la condenaban otros. Lo de la leyenda blanca y la leyenda negra. En los últimos años, a la par que la democracia y a la par que el aumento del tejido de lectores, que se ha incrementado muchísimo, no nos engañemos, creo que se consigue la normalización. Y, además, para un escritor la historia se ha convertido en un filón para crear ficciones desde un punto de vista puramente literario, sin necesidad de moralizar, de cargar la novela de ideología.
.¿Cuáles son los ingredientes básicos de la novela histórica?
-Es difícil dar una receta. Para mí lo importante es la fusión de la tradición popular y la tradición cultural. Apostar por una novela de género y una novela más ambiciosa, con pretensiones literarias e históricas. Y luego mezclar géneros que enganchan al lector: intriga, misterio... y al hilo de ellos tú les puedes ir incorporando otras cosas. En este caso yo he incorporado la novela policíaca, que es mi debilidad, porque este tipo de género te brinda una intriga que atrapa al lector y no lo suelta hasta el final.
Publicado en: Archivo con buena letra