Teresa Nieves Chinchilla es una mujer con la cabeza en las nubes… magnéticas, eso sí. Doctorada en Física por la UAH en 2004, Teresa ejerce de científica en el Centro de Vuelo Espacial Goddard (CVEG), un laboratorio de investigación de la NASA que en 1959 se estableció como el primer Centro espacial de vuelo de la NASA. Sus líneas de investigación se mueven por el medio interplanetario y su pasión por la ciencia la ha llevado a ser experta en Nubes Magnéticas, Radiación Cósmica y fenómenos asociados con el viento solar, plasma y campo magnético. Nieves piensa en sus años universitarios y recuerda momentos de mucho trabajo, unos buenos y otros duros pero el resultado de su ecuación final, es muy positivo. Ahora, inmersa en el proyecto Cluster, continúa “paseando” por el Universo y conociéndolo un poco más.

- ¿Qué estudió en la UAH?
Hice la tesis doctoral y me doctoré en el departamento de Física de la Facultad de Ciencias.

- ¿Recuerda su promoción?
Leí la tesis en septiembre de 2004

- Piense en la Universidad y dígame lo mejor y lo peor que recuerda
Si pienso en la Universidad de Alcalá vienen a mi cabeza muchos recuerdos. Muchos buenos y pocos malos… El resultado de la ecuación es positivo.
Entre los buenos, mi director de tesis, Miguel Ángel Hidalgo, al que le debo gran parte de lo que sé. Él fue un gran maestro y se convirtió en un buen amigo al que aprecio y respeto desde un punto de vista científico y personal.
Otros grandes y buenos recuerdos son las discusiones científicas y las discusiones menos científicas con mis colegas, muchas de ellas, entorno a un café. Recuerdo a los buenos amigos que allí he hecho, unos siguen allí y otros están fuera pero la Universidad sigue siendo nuestro punto de encuentro.
No puedo evitar evocar una sensación de cansancio y mucho esfuerzo, pero no lo hago con acritud sino con la satisfacción de que mereció la pena, de que me ha reportado grandes resultados.
Malos recuerdos… sólo uno, o mejor dicho, una… pero ya ni siquiera ocupa un lugar en mi mente.

- ¿Qué le han aportado los años universitarios? ¿Cree que la Universidad le ha abierto puertas?
Madurez. No se si será la Universidad en sí misma o que he estado demasiado tiempo en la Universidad (licenciatura y doctorado. ¡Muchos años!) y eso me ha hecho, inevitablemente, madurar. Realmente creo que ambas cosas.
Considero que la Universidad ha sido para mí una ‘plataforma de lanzamiento’. Ha sido el lugar donde he desarrollado el inicio de mi carrera científica pero realmente son las personas de esa Universidad las que me han abierto las puertas, mostrándome las opciones que podía escoger.
Por otro lado, me siento un poco desilusionada. Creo, o por lo menos esa es mi vivencia, que se prepara muy bien a los alumnos para que luego acaben trabajando en puestos que están muy por debajo de su formación.

-¿Cómo llegó a formar parte de la NASA? ¿Cuál es la función que desempeña?
El camino hasta llegar al centro espacial de vuelo Goddard tiene su inicio casi con la tesis doctoral. Cuando empecé a trabajar con fenómenos interplanetarios necesitaba datos específicos que el Dr. Adolfo F.-Viñas me proporciono. Él me comento la posibilidad de completar mi formación después del doctorado en este centro. Una vez que finalice la tesis, sometí un proyecto al programa Postdoctoral que finalmente aceptaron.
Mi trabajo es puramente científico y pertenezco al grupo de Heliofísica que hay en el centro de Goddard. Ahora mismo continuo trabajando en el medio interplanetario pero ya no estoy centrada específicamente en Nubes Magnéticas. Me interesa conocer otros fenómenos asociados con el viento solar, plasma y campo magnético. En concreto, en estos momentos trabajo con el proyecto Cluster y estudio el comportamiento de los electrones en las cercanías de la magnetosfera terrestre, es decir, como afecta este gran escudo en el viaje del plasma desde el Sol hasta la Tierra.

- ¿Cambiaría algo de su trayectoria?
Sí, pero ya no hay remedio. Además, sólo cambiaría algunas cosas después de haberlas hecho porque creo que las decisiones tomadas en su contexto fueron las adecuadas. En cualquier caso, de todo he aprendido.

- Es usted experta en nubes magnéticas y radiación cósmica de hecho su tesis doctoral fue el 'Estudio de la evolución de las nubes magnéticas en el medio interplanetario' ¿De qué manera nos pueden afectar las nubes magnéticas?
Las Nubes Magnéticas son fenómenos interplanetarios que tienen su origen en el Sol. El Sol en su actividad constante, de vez en cuando, libera, de una forma espectacular, gran cantidad de plasma y campo magnético que viajan hacia la Tierra. Estos eventos son conocidos como Emisiones de Masa Coronal. Estas estructuras de campo magnético y plasma tienen una forma helicoidal particular y característica que las diferencia de otros eventos en el medio interplanetario. Estas son las Nubes Magnéticas.
Cuando las Nubes Magnéticas llegan a la Tierra e interaccionan con la magnetosfera terrestre esto da lugar a otros fenómenos que pueden llegar a ser también espectaculares. Todos conocemos las Auroras Boreales, pero esta misma energía que da lugar a maravillas de la naturaleza también podría afectar a las telecomunicaciones, sistemas eléctricos, etcétera. Del mismo modo ocurre en el espacio. En estos momentos en los que el hombre trata de explorar el universo, conocer el entorno en el que viaja es fundamental. Igual que el marinero comprueba el tiempo antes de navegar, el astronauta debe conocer las previsiones ‘metereológicas’ del entorno en el que va a viajar con el fin de que su viaje no afecte ni a la nave, ni a él mismo.

- ¿Cuánto desconocemos del Universo que nos rodea?
Esa pregunta es tan larga de contestar como grande puedas pensar que es el Universo. Sería más fácil y rápido de contestar si me preguntaras cuánto conocemos del Universo.

Publicado en: Archivo antiguos alumnos