Profesores de la UAH crean un indicador que evalúa la calidad del empleo en el mercado laboral



Carlos García Serrano, Virginia Hernanz y José María Arranz
son los profesores de la UAH que han creado un indicador de calidad del empleo para el mercado laboral español, en el que se compara la situación de los trabajadores temporales de las ETT con los trabajadores temporales contratados directamente por las empresas y con los trabajadores indefinidos.

El indicador de empleo es fruto del estudio sobre calidad del empleo encargado por Asempleo, la Asociación de Empresas de Trabajo Temporal (ETT).

Entre las conclusiones que se desprenden del análisis llevado a cabo por este indicador destacan las siguientes. Los

José Marría Arranz, Carlos García Serrano y Virginia Hernanz.
trabajadores indefinidos, que suponen el 75% del total de asalariados, son los que disponen de más calidad en el empleo en España y no han sufrido grandes reducciones en sus condiciones laborales durante la crisis, si bien los niveles de calidad del empleo de los indefinidos estaban en 2014 en los mismos parámetros que en 2006. Por otro lado, si se compara la calidad del empleo de los trabajadores temporales contratados de forma directa y los que se contratan mediante las ETT, el análisis pone en evidencia que estos últimos tienen una mejor calidad en el empleo y, en particular, también un salario/día más elevado. En particular, los trabajadores más perjudicados durante la crisis han sido los trabajadores temporales contratados de forma directa por las empresas.

Los profesores de la UAH, que forman parte del grupo de investigación “Grupo de Economía Laboral de Alcalá” (GELA), han construido el indicador global de calidad del empleo utilizando los datos individuales de dos bases de datos: la EPA (Encuesta de Población Activa) y la MCVL (Muestra Continua de Vidas Laborales). En ambos casos, el período de análisis va desde los años 2005-2006 hasta los años 2013-2014.

Para realizar un análisis exhaustivo se han tenido en cuenta seis dimensiones: con la EPA, condiciones de trabajo (con información relacionada, entre otros aspectos, con horas pactadas y realizadas), cualificación y formación de los trabajadores dentro de las empresas y conciliación (con información sobre el trabajo que se hace en horas denominadas ‘antisociales’ y sobre la duración de la jornada laboral); con la MCVL, salarios, perspectivas profesionales y estabilidad en el empleo.

Después del análisis pormenorizado de todas ellas se puede señalar que ‘la calidad del empleo no ha variado mucho a lo largo del tiempo, aunque ha habido un aumento relativo durante la época de expansión económica y una reducción relativa durante la crisis’, tal como se menciona en el informe realizado para Asempleo.

Los trabajadores temporales directos salen mal parados en horas de trabajo, con horarios más antisociales, y en términos de cualificación y formación, ya que el estudio pone en evidencia que trabajan en ocupaciones que requieren menos cualificación y en las que se da poca formación. Con respecto a la estabilidad en la ocupación, el número de días trabajados se ha visto afectado enormemente con la crisis, lo que ha afectado sobre todo a los trabajadores temporales directos. Otro sub-indicador que ha empeorado por la crisis es el trabajo a tiempo parcial involuntario, que se ha incrementado durante los años recesivos, convirtiéndose en un elemento que reduce la calidad del empleo.
Por grupos de población, el nivel de la calidad del empleo entre los jóvenes menor que entre los trabajadores mayores y también son peores las condiciones del empleo cuanto menor es la cualificación que tengan los trabajadores.

El objetivo del equipo de investigación es mantener ‘vivo’ este indicador para vigilar la evolución de los niveles de calidad del empleo en los próximos años y también para poder hacer estudios desagregados que tengan que ver con distintos sectores de actividad, ocupaciones o grupos de población e, incluso, análisis comparativos internacionales.