El pleno del Consejo Social de la Universidad de Alcalá ha aprobado los presupuestos elevados por el Consejo de Gobierno para 2024, con un importe que supera los 227 millones de euros, un 10,7% más que en el ejercicio anterior. Esto supone un incremento moderado en cuanto a los ingresos y un crecimiento importante de los gastos, fundamentalmente en los capítulos de personal, materias primas, bienes y servicios.

Entre las inversiones más relevantes previstas para este año y el próximo destacan las actuaciones en el proyecto del nuevo Campus en la ciudad de Guadalajara, donde la Junta de Castilla La Mancha mantiene su aportación, que en este año ascenderá a 16 millones de euros. A ello se suman las obras de rehabilitación de Cuarteles, que avanzan a  buen ritmo; también los trabajos en la envolvente de la Facultad de Farmacia y varias viviendas de CRUSA, ambos en el Campus Científico Tecnológico. 

En el capítulo de personal, el presupuesto se presenta con un nuevo incremento del 4,2% respecto a 2023. Esto se debe a que durante este año se aplicará la Ley Orgánica del Sistema Universitario (LOSU) que regula nuevas obligaciones en las funciones de los centros universitarios, lo que hace necesario un aumento de las plantillas de profesorado. Aunque la ley prevé la financiación para estos cambios, ésta no se ha concretado aún, lo que podría condicionar un déficit y obligar a las universidades a recurrir a sus fondos para afrontar inicialmente estos nuevos gastos. Actualmente están en marcha las negociaciones con el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades para determinar las vías que darán solución a este problema.

En cuanto a los gastos de bienes y servicios, la Universidad pondrá en marcha un importante proyecto para mejorar la eficiencia energética con la instalación de placas fotovoltaicas, que supera los 3 millones de euros, haciendo así una fuerte apuesta por el uso de energías renovables que podrían suponer una reducción de aproximadamente el 50% en los costes de energía en los próximos años. Además, gracias a la buena y responsable actuación de toda la comunidad universitaria y a la negociación de tarifas con las compañías, se ha conseguido reducir la factura de los suministros durante este ejercicio.

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