El jurado ha valorado ‘su enfoque cercano y didáctico y la buena acogida que el vídeo ha tenido entre los medios de

Nieves Casado con el rector Galván en la entrega de los premios.

comunicación y el público especializado’.
Nieves Casado habla en esta entrevista de la importancia de utilizar herramientas como el vídeo para la divulgación científica y la docencia.

-Imaginamos que está muy contenta por este reconocimiento....
-Sí, por supuesto, estoy muy contenta y satisfecha porque es la primera vez que nuestra Universidad crea este tipo de premios para reconocer la importancia de la labor divulgadora de sus profesores.

-Usted lleva años trabajando en la divulgación y en esta ocasión con mucho éxito...
-Hace unos 15 años emprendí la gratificante tarea de la divulgación científica, impartiendo conferencias y charlas en universidades populares y asociaciones culturales, pero fue en el año 2005, mientras participaba en la Semana de la Ciencia, cuando en un taller sobre Anisakis incorporé un pequeño vídeo que había hecho para una práctica con los alumnos. Y entonces pude comprobar cómo facilitaba muchísimo la comprensión, de manera que la gente entendía mejor lo que yo les quería transmitir. De hecho, mi experiencia en la elaboración de vídeos procede de mi actividad docente, para la que he realizado 9 películas científicas que utilizo habitualmente en mis clases. No obstante, he de reconocer que el vídeo divulgativo no tiene nada que ver con un vídeo para uso docente, son dos cosas muy diferentes aunque utilicen la misma herramienta audiovisual.
Lo cierto es que yo siempre tuve la inquietud y el sueño de hacer un vídeo expresamente divulgativo, que me permitiese llegar a mucha gente y contribuir a su educación sanitaria. En el caso del vídeo premiado, el objetivo era prevenir la parasitación por Anisakis. Ahora bien, reconozco que nunca pensé que pudiese llegar a tener una aceptación tan buena por parte del público, llegando casi a las 400.000 reproducciones, y que 291.000 personas lo vieran completo a pesar de sus 15 minutos de duración y, desde luego, nunca soñé con que fuese a ser visualizado en 141 países. Todo esto ha sido para mí ya un premio que ha desbordado mis expectativas.

-¿Por qué prefiere el vídeo a otras 'herramientas' de difusión, ¿qué cree que aporta de más?
-Si tenemos en cuenta que lo que nos entra por los ojos se nos queda grabado mucho más que lo que oímos o leemos y que el 94% de la información la captamos a través de la vista y el oído, está claro que el audiovisual reúne las características más adecuadas para asegurar una buena recepción de la información transmitida. Además, el vídeo nos permite mostrar en pocos minutos lo que llevaría mucho más tiempo explicar verbalmente. Y no nos olvidemos de que estamos en la era de la inmediatez, lo queremos todo ya mismo. Por otro lado, si el vídeo está bien hecho atrae, es capaz de captar rápidamente el interés de la persona que lo está viendo y de mantenerla receptiva hacia el mensaje que se quiere transmitir. Y si a la fuerza impactante de la imagen unimos una adecuada sonorización se consigue un mayor porcentaje de retención de la información al cabo del tiempo, lo que es realmente interesante tanto en el terreno de la divulgación como en el de la docencia.

-¿Está trabajando en nuevas propuestas?
-Sí, desde el año pasado estoy llevando a cabo junto con mi grupo de Innovación Docente i-COMB (siglas de Innovation, Communications, Multirate systems, and Biomedical Engineering) un proyecto para la realización de vídeos con animaciones 3D. Estos vídeos nos permiten simular procesos biológicos en el campo de la Parasitología que, debido a sus peculiaridades, serían muy difíciles de grabar en la realidad. Y, a la vez, estamos intentando evaluar el impacto que tienen este tipo de audiovisuales con animación 3D en el proceso de aprendizaje de los alumnos.

-Denos algunos consejos para los compañeros de la UAH que quieran adentrarse en esta aventura de la divulgación científica mediante vídeos
-Lo primero que les aconsejaría es que estén realmente convencidos de la necesidad de divulgar, para que las dificultades con las que se van a encontrar no les hagan desistir de su empeño. Es verdad que actualmente la tecnología facilita que cualquiera puede hacer un vídeo y colgarlo en Internet, pero de lo que se trata en la divulgación es ante todo de comunicar y hacerlo bien. Y claro, esto lleva su tiempo, son necesarias muchas horas de dedicación y de buscar el asesoramiento de los profesionales de la comunicación audiovisual. También hay que tener presente que divulgar no es bajar el listón, sino que se trata de mantener el rigor que exige el conocimiento científico pero transmitiéndolo de una forma sencilla y natural, empleando una terminología accesible al público en general. Debemos de ser conscientes de que muchas personas desconectan cuando habla un investigador que no es capaz de hacerse entender porque les aburre.

‘Anisakis y otros parásitos del pescado’

Publicado en: Archivo entrevistas-reportajes