Julia Buján es catedrática de Histología e Ingeniería Tisular de la UAH desde el año 2004. Antes de esa fecha ya ejercía responsabilidades en distintos ámbitos de gestión. Su último reto ha sido guiar el cambio de estructura de centros como

Julia Buján.

Decana de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud. Ahora afronta un nuevo compromiso, el Vicerrectorado de Personal Docente e Investigador, en un momento crítico, marcado por las políticas de austeridad en materia de docencia e investigación que imponen las Administraciones Públicas.

-¿Cómo afronta este nuevo reto, vicerrectora?
-Lo afronto con mucha responsabilidad. Se trata de un cargo muy técnico, con distintas competencias. Es para mí un reto dado que el personal docente e investigador es uno de los grandes pilares de esta Universidad. Consciente de ello, abordo esta nueva etapa con gran ilusión y deseando estar a la altura que exige esta coyuntura en la que, tanto la Ley, por un lado, como el presupuesto económico, por otro, dificultan cualquier estabilización, promoción o crecimiento de la plantilla.

-¿Cuáles son los principales objetivos del Vicerrectorado?
-Teniendo en cuenta lo que he dicho previamente, nuestro objetivo básico es poder estabilizar a todos los profesores que en este momento están en situación precaria y promocionar a aquellos que, en esta etapa tan dura, están cumpliendo con los requisitos.
Desde este espacio me gustaría, de nuevo, ya que lo hago de forma personal y colectiva cada vez que tengo oportunidad, agradecer la labor que realizan nuestros profesores e investigadores que, a pesar de los recortes, y a pesar de la falta de expectativas profesionales, siguen ahí, con toda la ilusión, realizando una excelente docencia y una investigación en la primera línea. Y, como docente e investigadora, puedo decir que no resulta fácil, en condiciones tan duras, disponer del ánimo y del empeño necesarios para seguir adelante. No voy a cansarme de darles las gracias, se lo aseguro, porque ante los recortes nuestros profesores han respondido con más dedicación y más entrega personal.

-¿Y por qué cree que esa ha sido la respuesta?
-Fundamentalmente porque, aunque esta Universidad es relativamente joven, creo que el personal docente e investigador cree en la UAH, está satisfecho con pertenecer a esta institución y confía en el futuro. Por eso creo que hay que reconocer su labor y sus esfuerzos de forma pública.

-¿Qué cree que es lo peor de esta situación de parálisis impuesta por las Administraciones Públicas?
-Pienso que lo peor de todo es la incertidumbre. Los jóvenes tienen un camino muy difícil por delante, porque hay muchos nuevos doctores a quienes les apasiona la docencia y la investigación, perfectamente formados, que conocen la dificultad de poder avanzar en este camino porque no tenemos capacidad de contratación… ¡es un auténtico drama!.

-Imaginamos que esto puede ser una circunstancia, pero no puede convertirse en una situación permanente
-Eso es lo que estamos pidiendo constantemente al Gobierno Central, que modifique la Ley, que permita reposición de personal, la promoción y nuevas incorporaciones, porque si esta situación permanece se va a destrozar un bien público, como son las universidades públicas, que ha costado décadas consolidar y no podemos dejar que se derrumbe. Sobre todo, porque si abandonamos la formación de nuestros jóvenes estamos abandonando el futuro de nuestro país. La situación de la estabilización y promoción de los docentes es penosa, pero la de la investigación es brutal, porque los grupos de investigación que han tardado décadas en consolidarse se están desmoronando por falta de financiación para sus proyectos.

-La UAH está haciendo un esfuerzo importante por mantener e incluso incrementar los niveles de calidad de la docencia y la investigación, a pesar del mal momento
-Sin duda, con gran esfuerzo por parte del equipo de gestión anterior, la docencia en la UAH es mucho mejor que la que existe en otras universidades públicas de nuestro entorno, como lo ponen de manifiesto las encuestas y ránkings. Asimismo, se han habilitado ayudas a la investigación, ayudas a la movilidad y otro tipo de incentivos para tratar de conseguir que los grupos de investigación puedan continuar desarrollando su trabajo en unas condiciones favorables.

-El Vicerrectorado también tiene competencias en la relación con los centros sanitarios dependientes de la UAH. La situación de esta universidad, en ese ámbito, es privilegiada…
- Sí, es cierto, nuestra relación actual con las instituciones sanitarias es muy cordial y de entendimiento mutuo. Somos un modelo único: nuestros hospitales universitarios pertenecen a dos Comunidades Autónomas diferentes y esa relación también se amplía al Ministerio de Defensa, que gestiona el hospital Gómez Ulla. Nuestro modelo, como digo, es singular, y estamos muy orgullosos de ello. Nuestro rector ha entendido desde siempre la importancia de los estudios de las Ciencias de la Salud para la UAH y para ello es necesario que las relaciones con las diferentes instituciones se cuiden con esmero. Ahora, en esta nueva etapa, ha asignado a este Vicerrectorado dichas competencias y trataré de hacerlo con la mayor diligencia. Conseguir que todos nuestros hospitales universitarios tengan el máximo número de profesionales asistenciales implicados en la docencia, mediante el estímulo de la carrera docente, para lograr su vinculación permanente con la UAH, será una meta que, si bien en el presente no es posible, sí la trabajaremos con ilusión mientras llega el momento en que podamos hacerlo realidad.

-¿Un hilito de esperanza, vicerrectora?
-¡Pues claro que sí!. Parece que los datos macroeconómicos empiezan a ser favorables en España y yo espero que esa pequeña luz llegue a la universidad, porque lo necesitamos. Mientras esa luz llega, yo invito a los profesores e investigadores de la UAH a perseverar, porque si no desfallecemos y somos constantes, llegaremos.

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