No existe prueba científica para el anunciado fin del mundo



El fin del mundo no llegará mañana. Así lo asegura la profesora de Historia de América de la UAH, Carmen Pumar, que plantea una explicación científica frente a la especulación sobre las predicciones mayas del fin del mundo.

El Vaticano, la Nasa, el primer ministro ruso, el CSIC… son múltiples las instituciones y autoridades políticas que en los últimos días han emitido comunicados y declaraciones públicas negando el fin del mundo. Mañana, día 21 de diciembre de 2012, es la fecha clave. La profesora de Historia de América, Carmen Pumar, explica en esta entrevista por qué se ha formado tanto revuelo con presuntas predicciones que, en su opinión, tienen un carácter especulativo y comercial y ningún fundamento científico.

Carmen Pumar.


-¿Cuál es el origen de esta predicción maya, profesora?
-Yo pienso que el origen es completamente comercial. La historia de los mayas es completamente desconocida para la mayoría y eso invita a la elucubración. Ciertos sectores han encontrado un campo abonado en este desconocimiento para especular y utilizar información a su antojo y tanto el cine como la literatura más generalista se han sumado a ello.
¿El origen real de esta predicción?. No existe. No hay nada en la historia de los mayas que pueda llevar a creer mínimamente en algo parecido. Los propios mayas que hoy sobreviven en Méjico y en las regiones antiguas donde ellos habitaban no tienen ningún concepto asumido sobre el fin del mundo.

-Y entonces, ¿a qué se debe tanto revuelo?
-El hecho puntual al que obedece esta especie de ‘creencia’ ficticia es el sistema aritmético que utilizaban los mayas para elaborar su calendario. Este pueblo tenía un calendario muy complejo con el que trataban de controlar de forma científica los fenómenos naturales que iban a producirse con el fin de poder adelantarse a los acontecimientos. Los mayas intentaron controlar el tiempo mediante sus estudios aritméticos. Fueron auténticos maestros de la aritmética y eso les permitía hacer cuentas sobre distintos ciclos vitales. Para ellos, esta fecha, mañana, es el fin de un ciclo, pero para los mesoamericanos el fin de un ciclo no significa el fin del mundo. No hay concepto de fin apocalíptico, que es propio de la tradición judeocristiana; para ellos el fin de un ciclo era el declive de un ciclo y el inicio de otra etapa. A ellos no les dio tiempo de elaborar un nuevo ciclo vital porque desaparecieron envueltos en el misterio, pero de ninguna manera eso significa que el cierre del ciclo suponga el fin del hombre en la tierra.

-¿Qué era para los mayas un ciclo vital?
-El principio y el fin de una etapa. La imagen era el círculo, que fue luego heredado en la tradición azteca. El círculo tiene relación con el disco solar. Ellos eran unos grandes observadores de los astros y el astro rey era el sol. Se refería a la trayectoria vital del sol, a las cosechas, a los fenómenos meteorológicos que les rodeaban. Trabajaban con su sistema vigesimal y sus unidades calendáricas.

-Ya ha comentado que los mayas son una civilización muy desconocida y eso siempre llama a la puerta del misterio…
-Son unos grandes desconocidos. Para que nos hagamos una idea, las primeras excavaciones de los grandes focos ceremoniales de este pueblo comenzaron en 1956, en Tikal, uno de los más importantes y representativos por su gran pirámide, así que nos queda muchísimo por descubrir.

-La pregunta es ¿por qué no les dio tiempo a realizar otro ciclo vital?
-Porque no les dio tiempo, desaparecieron misteriosamente. La última de sus grandes construcciones está datada en el año 909 después de Cristo, y a partir de ahí no hay ningún dato más sobre los mayas clásicos. Se produjo una diáspora y distintos linajes fueron ocupando nuevos territorios, pero de pronto concluyó esa civilización, aún no sabemos por qué a ciencia cierta.

-¿Qué debemos aprender de la civilización Maya?
-Yo creo que los mayas nos pueden enseñar una vida más acorde con el medio natural y, sobre todo, un modo de controlar el tiempo que no esté basado sólo en un rendimiento material. Para nosotros el tiempo es oro; para ellos el tiempo era un devenir vital.

-Así que, profesora, el fin del mundo está por predecirse
-Desde luego lo que sí podemos predecir es que después del día 21 vendrá el día 22 y habrá personas que se hagan millonarias con el sorteo de la Lotería de Navidad. Y seguro que el día 22 la magia y la ilusión será la protagonista absoluta.