Ambiox Biotech: una investigación convertida en empresa




Otra de las empresas de base tecnológica que están en trámites de creación en la UAH es Ambiox Biotech, constituida por el grupo de investigación de la UAH de Dendrímeros para Aplicaciones Biomédicas y el grupo de Inmunobiología Molecular del hospital Gregorio Marañón.

Los dos profesores de la UAH que participan en este proyecto, Javier de la Mata y Rafael Gómez, explican qué es Ambiox Biotech y cuáles serán sus actividades.

-¿Qué es Ambiox Biotech?

Rafael Gómez y Javier de la Mata.

-Es una empresa que surge de la colaboración entre el grupo de investigación de Dendrímeros para aplicaciones Biomédicas de la UAH y el grupo de Inmunobiología Molecular del Hospital Gregorio Marañón, dirigido por la doctora María Angeles Muñoz y el primer objetivo es el desarrollo de un microbicida de uso tópico para la prevención de la infección por VIH.

-¿Pueden profundizar un poco más y explicarnos qué funciones tendría este microbicida?
- Los trabajos de investigación realizados hasta el momento han generado dos patentes a nombre de la UAH y del hospital Gregorio Marañón y Ambiox Biotech tendría la licencia de explotación de estas patentes para la generación del microbicida que queremos preparar.
Este microbicida se basaría en moléculas dendríticas de tamaño nanoscópico y ya ha demostrado su efectividad en los ensayos in vitro realizados hasta el momento. Ahora, hemos establecido contacto con un grupo inglés para el desarrollo de la formulación farmacéutica del producto en forma de gel y, una vez que obtengamos este gel completaremos los estudios previos a la fase clínica. Es un proceso que esperamos completar en 2 ó 3 años, aunque el producto puede tardar en llegar al mercado entre 7 y 10 años.
Además, Ambiox pretende estudiar la aplicación de estos dendrímeros en distintos ámbitos de la biotecnología, como la cosmética, la agroaliemtnación o la terapia génica.


-La iniciativa nace avalada por varios premios
-Sí. Nos han dado varios premios por esta idea empresarial: el primero de la Fundación Genoma España, dotado con 30.000 euros, al mejor plan de negocios, dentro del concurso de bioemprendedores. También hemos recibido un premio de la Fundación Bancaja a las mejores ideas empresariales, dotado con 5.000 euros, y en la UAH también hemos recibido el 3º premio en el concurso de ideas de la OTRI para la creación de EBT.

-¿Y por qué decidieron constituirse en EBT?
-Por el deseo de explotar las patentes que generamos y porque los investigadores de los dos grupos que conformamos esta empresa apostamos por la innovación y por la transferencia de tecnología a la sociedad. Además, de este modo intentamos aprovechar la formación de nuestros investigadores y generamos expectativas de empleo cualificado para ellos.

-¿Está resultando difícil constituir la empresa?
-Hay dos dificultades básicas: el procedimiento de constitución de la empresa y, sobre todo, la tarea administrativa que conlleva y, por otro lado, la falta de formación con la que cuentan los investigadores a la hora de establecer un plan de negocio. En ambos aspectos la OTRI nos ha ayudado mucho. Pero la dificultad más importante es conseguir financiación para poder iniciar la empresa. Esto es determinante.

-¿Qué aconsejarían a los investigadores que se estén planteando crear una EBT?
-Creemos que si hay una idea que puede ser trasferida, merece la pena intentarlo, porque hay instrumentos de apoyo para poder llevar a cabo el proceso de creación de la empresa.