Manuel Peinado: la universidad que nos une
Manuel Peinado, Catedrático de Botánica, también fue durante cuatro años alcalde de Alcalá. Cuando se le pregunta por esos años y por esta nueva etapa, su respuesta es clara: "Estoy preparado para ser rector y no estaba preparado para ser alcalde". La universidad que nos une es el lema de su campaña y su objetivo, colocar a la Universidad de Alcalá entre las universidades de primera categoría. Un 20 centros serán los elegidos para estos puestos de primera. El resto bajará a segunda e incluso a tercera división. Su web es su carta de presentación, y si las estadísticas hablasen, confirmarían la gran curiosidad que ha despertado su recorrido en primera persona por su infancia y adolescencia, vida familiar y estudios.
Manuel Peinado Lorca
- ¿Por qué quiere ser rector?
56 años
Catedrático de Botánica
- Porque tengo la esperanza en una universidad mejor, construida por los universitarios que amamos a esta universidad.
- ¿Qué le falta y que le sobra a la Universidad de Alcalá?
- Le falta centrarse más en los aspectos fundamentales de la vida universitaria, que se llaman Docencia, Investigación e Innovación y Transferencia de Tecnología. Esta universidad se va a ver inmersa en un proceso de competencia entre universidades que a su vez se van a agrupar en diferentes categorías. Yo creo que nosotros tenemos las potencialidades suficientes como para estar en la primera categoría. Contamos con un campus de Humanidades fuerte, un campus de Experimentales con los Hospitales asociados especializados en el área de la Biomedicina y tenemos también unas perspectivas extraordinarias dentro del Politécnico y en el campus de Guadalajara.
- Estamos en tiempos de crisis, con una situación complicada, ¿cómo ve el futuro de la universidad?
- Vamos a salir de la crisis y ahora lo que hay que hacer, cuando falta el recurso económico, es mejorar el detalle: las aulas, los recursos de apoyo a la docencia, y sobre todo planificar el futuro. De tal forma que es momento de hacer proyectos, programas para que cuando emerjamos de la crisis estemos preparados para acelerar.
- ¿Corren peligro las universidades en esta situación de crisis? ¿podría darse el caso de que se cerrase alguna universidad?
- Los documentos ministeriales dicen que ninguna autoridad política, ni autonómica ni nacional, va a cerrar ninguna universidad, pero las va a cerrar el mercado vía financiación, vía demanda. Va a haber universidades que si no se posicionan en buenas categorías van a carecer de demanda. Porque una titulación de una universidad de primera división, de una universidad excelente, va a marcar para siempre la vida profesional de un estudiante. Eso ahora no se nota, pero se va a notar en el futuro. En sistemas universitarios mucho más avanzados que el nuestro es muy diferente que el alumnos sea licenciado por Harvard o por una universidad desconocida del Medio Oeste.
Sin duda, eso va a ocurrir en España. El sistema es complejo, ha atendido a las necesidades de socialización universitaria del país, pero ya no soporta la excelencia en todo. Luego se van a diferenciar universidades excelentes, medianamente excelentes y universidades profesionales, expedidoras de títulos en las que al final no va a haber demanda para ellas. El mercado cerrará universidades.
- ¿Y la Universidad de Alcalá podrá estar en esa primera categoría, la de los mejores?
- Podemos hacerlo. Todo apunta, a partir de los documentos que circulan sobre análisis de las universidades, que habrá un grupo de unas 20 universidades en esa primera categoría.
- Fue alcalde, ha ocupado diferentes cargos de Gobierno dentro de la Universidad, ¿se trata de ambición o de compromiso?
- Si alguno lee mi biografía verá que no tengo ninguna ambición de tipo económico, me considero muy bien pagado, tengo suficiente y soy un privilegiado. A mis colaboradores de mis tiempos de alcalde y a los de ahora siempre les digo que ocuparía el puesto con una capucha. Es decir, no tengo afán de protagonismo, me gusta entrar en los sitios y que no me conozca nadie, y eso en la vida pública es difícil. Ahora bien, sí tengo una gran ambición y es cambiar la realidad que me rodea. Pensé que se podía cambiar la realidad de una ciudad y pienso que se puede cambiar la realidad de una universidad. El asunto está en que la ambición debe tener una base de preparación y yo estoy preparado para ser rector y no estaba preparado para ser alcalde.
Un mensaje para el PDI, PAS y Estudiantes |
Hago una llamada para el Personal Docente e Investigador que apostó por esta universidad y está trabajando en ella. Esta es una universidad con historia, pero todavía es una universidad joven, que puede definirse como una excelente universidad, completa, pero para ello necesito que recuperen la ilusión los que no la tienen y que se impliquen en el proceso que ahora comienza. |
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