En estos cuatro años, la internacionalización de la Universidad de Alcalá ha dejado de ser un horizonte aspiracional para convertirse en una realidad estructural que impregna la vida universitaria. Hemos pasado de una internacionalización entendida como movilidad puntual a una estrategia global que conecta a nuestras facultades y escuelas, departamentos y servicios con el mundo. En un contexto europeo en plena transformación, la UAH ha sabido situarse en la conversación de las grandes universidades del Espacio Europeo de Educación Superior. Lo ha hecho combinando ambición y prudencia, cimentando una estructura sólida que garantiza continuidad y calidad. Hoy podemos afirmar que la internacionalización no es un apéndice de nuestra universidad, sino uno de sus motores esenciales de crecimiento y reconocimiento.
Entre los logros alcanzados, destacan los avances en movilidad y financiación europea. En este periodo hemos multiplicado los recursos procedentes del Programa Erasmus+, alcanzando una cifra histórica de más de 2,3 millones de euros en 2025, lo que ha permitido realizar más de seiscientas movilidades salientes, números nunca alcanzados antes en el programa Erasmus+, y reforzar la formación y la proyección internacional de estudiantes, profesorado y personal técnico. Este impulso no solo ha incrementado el número de experiencias internacionales, sino que ha situado a la Universidad de Alcalá entre las primeras del sistema universitario español en volumen de financiación y gestión de programas europeos. La implantación de la plataforma ISA ha transformado, además, la manera en que gestionamos las movilidades, aportando transparencia, agilidad y datos estratégicos para la toma de decisiones. La internacionalización, hoy, es también una forma moderna y eficiente de gobernar.
Pero el verdadero salto cualitativo ha venido de la mano de nuestra incorporación a EUGLOH, la European University Alliance for Global Health. Desde enero de 2023, formar parte de esta red de universidades europeas de excelencia ha supuesto un punto de inflexión en nuestra manera de entender la cooperación académica. EUGLOH no es solo un proyecto más: es el espacio donde se están definiendo las bases del futuro European Degree, la credencial universitaria europea que cambiará el modo de reconocer la educación superior en el continente. Gracias a esta alianza, nuestro profesorado participa ya en más de veinte actividades conjuntas de docencia e investigación, hemos impulsado más de trescientas movilidades y hemos acogido a centenares de visitantes internacionales. La Universidad de Alcalá está, por primera vez, en el núcleo de un proceso europeo de transformación universitaria.
La participación en EUGLOH también ha transformado la vida interna de nuestra universidad. Los 'Cafés Innovadores', las estancias doctorales, los proyectos de innovación pedagógica o los encuentros entre ingeniería y salud son solo algunos ejemplos de cómo la alianza ha generado un nuevo dinamismo en nuestros campus. Estos espacios de intercambio y creación compartida son la manifestación más clara de lo que significa internacionalizarse de verdad: abrirse, cooperar, aprender juntos. Por eso, poner obstáculos administrativos o mostrarse ajeno a este proceso no solo ralentiza nuestro avance, sino que nos coloca al margen de los grandes cambios que ya están configurando el nuevo mapa universitario europeo. Participar activamente en EUGLOH no es una opción: es una necesidad estratégica si queremos seguir siendo una universidad con voz propia en el contexto internacional.
Todo este trabajo no habría sido posible sin el compromiso colectivo de quienes forman parte de la Universidad de Alcalá y, de manera especial, sin el apoyo incondicional del rector, José Vicente Saz Pérez, cuya confianza y respaldo han permitido que la internacionalización sea una prioridad institucional y una política transversal. Como vicerrector, he defendido siempre la convicción de que internacionalizar no es viajar más, sino pensar distinto. Me mueve la certeza de que la Universidad de Alcalá merece estar donde está: reconocida, respetada y conectada con el mundo. Si hoy podemos decir que ocupamos el lugar que nos corresponde en el escenario internacional, es gracias a una estrategia coherente, a un equipo de gobierno y a una comunidad universitaria comprometidos, y a una idea clara: que abrir la UAH al mundo es, en realidad, abrir el futuro.