Alumnos de la UAH idean un espacio residencial innovador para el bienestar de las personas mayores

Manuel Consuegra, Miguel Guerrero y Fermín Jiménez, alumnos del Grado en Fundamentos de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Alcalá, lograron la mención local en la última edición del Concurso Pladur® con la propuesta Espacios de encuentro.

Una alternativa, una segunda oportunidad, incluso, una refundación del concepto, eso es a lo que se han aproximado Manuel Consuegra, Fermín Jiménez y Miguel Guerrero en la ideación del proyecto arquitectónico Espacio para el encuentro. Los alumnos del Grado en Fundamentos de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Alcalá obtuvieron el reconocimiento en la categoría de local por la XXXI edición del Concurso de Soluciones Constructivas Pladur®, un aliciente para transformar el espacio público en favor del bienestar social. 

La razón para lanzarse rápidamente a esta aventura consistió en que se trataba de una oportunidad para participar en uno de los más prestigiosos y populares concursos para el estudiantado de las escuelas de arquitectura en España, además de que la elaboración de un portfolio personal donde se muestren sus habilidades: "Queríamos comenzar con este tipo de propuestas de cara a nuestro futuro desarrollo profesional. Además, la amplia gama de productos Pladur nos permite proyectar desde la flexibilidad de los espacios interiores hasta su equipamiento más específico". 

Alumnos de la UAH idean un espacio residencial innovador para el bienestar de las personas mayores plano
Plano del proyecto arquitectónico

Acerca de los detalles, especifican que el muro está equipado con todos los estímulos espaciales; las plazas interiores cuentan con un programa variable, desde las que se articulan las unidades de convivencia personalizadas; y el no pasillo consiste en que los espacios comunes lo nieguen y se abran al encuentro, por lo que en vez de un laberinto aislante se convierta en un trazado orgánico para el paseo y el traslado de los convivientes. El perfil de un anciano con formación y experiencia universitaria suponía un reto. "Trabajamos muy incisivamente en la posibilidad de hibridar espacios y permitir la flexibilidad de las unidades habitacionales de convivencia, pudiendo albergar cualquier sensibilidad u oficio de nuestros maestros de tercera edad. Para ello, planteamos numerosas hipótesis de personalización del espacio en las que la intimidad y la relación con el entorno natural fueran premisas indispensables", subrayan.

Así, en los bocetos que acompañan a esta pieza se puede apreciar la armonía de las líneas y la sincronía con el verdor de los alrededores. "Para ello, proyectamos 'de dentro a fuera' en una cota única espacios equipados, espacios de articulación y unidades habitacionales de convivencia".

La pandemia de la Covid-19, tan devastadora como solitaria, sirvió de inspiración a estos profesionales que buscaban ser útiles a su comunidad: "Se trata de dar una respuesta diferente a la tipología de residencia de ancianos buscando una revisión de esta, aportando una mejora y valor a la vida de nuestros mayores". Un esfuerzo conjunto por dar un lugar amable y colorido en una etapa tan difícil de la vida, al contrario de lo que les sucede a muchas personas mayores que viven solas en sus casas, como ocurre con más de 850.000 ancianos de 80 años en España, según varios estudios.

Una disciplina que contribuye a mejorar la sociedad

Manuel Consuegra Miguel Guerrero y Fermín Jiménez
Fermín Jiménez, Miguel Guerrero y Manuel Consuegra

"De esta forma, evitamos generar focos, pero sin dejar de promover nexos de convivencia, rechazando la sensación de encierro y soledad a la que estos espacios se han visto sometidos ante esta pandemia". La satisfacción que sintieron al recibir el premio, enfatizan, solo es comparable al hecho de que su esfuerzo sea reconocido en la Escuela. En cuanto a los próximos pasos, aunque la propuesta Espacio para el encuentro en Carcavelos no tenga más recorrido, no dudan de que este aprendizaje lo llevarán consigo el resto de sus carreras.

El trío de futuros arquitectos cursa su último curso en el Grado en Fundamentos de Arquitectura y Urbanismo. Manuel Consuegra, Miguel Guerrero y Fermín Jiménez, quienes preparan actualmente el Trabajo de Fin de Grado, consideran que su paso por la Universidad de Alcalá les ha beneficiado para su proyección: "La formación de la Universidad y, en particular, el Grupo Taller de la asignatura de Proyectos Arquitectónicos, nos ha provisto de herramientas, tanto personales como proyectuales, para afrontar este tipo de retos. La praxis como leit motiv de nuestra formación es, sin duda, uno de los pilares sobre los que apoyamos nuestras decisiones como arquitectos".

Con esta premisa, y siendo un trabajo a tres voces, la compenetración y el entendimiento entre los jóvenes ha sido completo, sobre todo, para sobrellevar la notable carga de una misión de tal envergadura: "Esta manera de trabajar es fundamental, ya no para la arquitectura, si no para cualquier disciplina en la que intervengan diferentes técnicos en equipos multidisciplinares", afirman. Manuel, Miguel y Fermín defienden la arquitectura como una disciplina de cambio que posee un condicionante social imperante: "No podemos entender la arquitectura sin las personas que la habitan". Por ello, están decididos a perfeccionar los conocimientos técnicos y artísticos para cumplir ese cometido. 

Publicado en: Entrevista