David Guzmán, doctor por la UAH e investigador ligado al Grupo de Investigación SRG de esta Universidad, explica en la entrevista su participación en el proyecto Firestation de la NASA y su visión y perspectiva como investigador.

David Guzmán.

-Su nombre ha 'explotado' en los medios de comunicación españoles relacionándole con un proyecto de la NASA para analizar las energías que emiten las tormentas. Háblenos de ese proyecto
-El objetivo principal del proyecto es estudiar las emisiones de Rayos-Gamma Terrestres (TGFs por sus siglas en inglés) y su posible relación con los rayos que se generan en las tormentas. Los TGFs son capaces de generar flujos de energía de inestimables proporciones, llegando a alcanzar energías superiores a los 100 mega electron-voltio (MeV). Su descubrimiento es relativamente reciente, data de 1990, y todavía hay muchas cuestiones por resolver sobre ellos. Firestation, el proyecto en el que yo participé, es la continuación de otro proyecto de NASA llamado Firefly que va a ser lanzado próximamente. Firefly es un satélite de tamaño muy reducido denominado Cubesat, que tienen un tamaño de tan solo 10x10 cm y un peso inferior a 1 kg. Firestation pretende continuar el estudio de este fenómeno aprovechando la posición privilegiada en la que se encuentra la Estación Espacial Internacional, donde está actualmente instalado.

-Su trabajo como ingeniero ha consistido en participar en el diseño del experimento Firestation. Cuéntenos en qué consiste
-Firestation es un conjunto de instrumentos de heliofísica, que incluye un magnetómetro, fotómetro y antenas encargadas de la medición de campos eléctricos y magnéticos. Yo fui el responsable de la Unidad de Proceso de Datos (UDP). La UDP se encarga de controlar los instrumentos, permitiendo calibrarlos, modificar su configuración y también de procesar la información que se obtiene de los mismos y su posterior envío al ordenador de a bordo del sistema para que pueda ser transmitida a la Tierra y ser analizada por los científicos.

-Ahora trabaja para la empresa privada aerospacial, pero usted llegó a Estados Unidos para trabajar en la NASA, en las instalaciones de Goddard, ¿cómo surgió esa oportunidad?
-Durante la realización de mi tesis doctoral asistí a un congreso en Goddard donde conocí a la doctora Teresa Nieves Chinchilla, que también forma parte del Grupo de Investigación del Espacio, SRG, de la Universidad de Alcalá, y me presentó a un científico que estaba interesado en el trabajo de investigación que yo estaba desarrollando.

-Llegó a Estados Unidos en 2010 e imaginamos que desde allí está percibiendo también lo que está ocurriendo en España a nivel general y con la ciencia y la investigación en particular, ¿qué opina al respecto?
-Pues creo que se está cometiendo un grave error al reducir o casi eliminar los presupuestos en ciencia e investigación. Durante los últimos años se habían realizado inversiones que habían conseguido dotar a España de instalaciones y medios que estaban permitiendo realizar avances en diferentes campos científicos y proveer a nuestras instituciones e investigadores de prestigio a nivel internacional. Con todos estos recortes se están provocando, por un lado, parones en estas investigaciones y, por otro, un éxodo masivo de personas con un alto nivel de formación que se va a tardar mucho tiempo en poder recuperar. Es muy triste que se haya invertido tanto tiempo y recursos económicos en formar a esas personas para que después sean otros países los que vayan a disfrutar de su capacidad y no vaya a revertir nada en España.

-¿En qué está trabajando ahora y cuáles son sus objetivos futuros?
En la actualidad estoy trabajando en una empresa del sector aeroespacial y la defensa. Los proyectos en los que estoy involucrado están asociados al Departamento de Defensa de los Estados Unidos; estoy colaborando en un sistema de seguridad que combina distintos tipos de sensores y tecnologías y en el diseño de un vehículo no tripulado. En un futuro cercano me gustaría poder constituir mi propia empresa y poder desarrollar instrumentación científica para aplicaciones espaciales.

-¿Cómo recuerda su paso por la UAH?
-Tengo muy buenos recuerdos de mi paso por la Universidad pero, sin duda, el mejor de ellos es el grupo de personas con las que compartí esos años y especialmente toda la gente que tuve la fortuna de conocer durante la realización de mi tesis doctoral en el Grupo de Investigación SRG. La Universidad de Alcalá además de darme la posibilidad de formarme, me dio también la posibilidad de conocer a muchos y buenos amigos.

-Un consejo para los estudiantes de la UAH
-Yo les aconsejaría que disfruten al máximo su estancia en la universidad. Es una etapa única, porque una vez que empiezas tu carrera laboral todo cambia radicalmente y el tiempo pasa muy rápido. Aunque la situación económica actual es bastante compleja y hay pocas oportunidades laborales, yo les recomendaría que no se desanimen y que sigan estudiando y formándose. Tener una buena preparación al final te abre muchas puertas. También considero que es muy importante poder disfrutar de alguna estancia en el extranjero. Yo tuve la fortuna de disfrutar de una beca Erasmus y la verdad que ese fue un punto de inflexión en mi desarrollo personal y profesional.

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