La Universidad de Alcalá entrega el primer instrumento de Solar Orbiter, la misión espacial de la Agencia Espacial Europea y la NASA que se acercará al Sol con la instrumentación científica más avanzada de la Historia
La Universidad de Alcalá ha sido la primera de las instituciones involucradas en la Misión espacial Solar Orbiter en hacer entrega de un instrumento ya terminado y listo para su uso a Airbus Defense on Space UK, la empresa que está construyendo la nave.
El dispositivo, denominado ‘Energetic Particle Detector, tiene como objetivo medir la radiación solar y ha sido ideado y desarrollado en la Universidad de Alcalá y su ordenador central fabricado en la empresa CRISA, con sede en Tres Cantos. Es un instrumento flexible, tanto en su ‘hardware’ como en su ‘software’, para poder adaptarse a cualquier situación imprevista dentro de la misión.
Solar Orbiter, una misión del Programa Científico de la Agencia Espacial Europea en colaboración con la NASA pretende acercarse al Sol a una distancia inferior a la de la órbita de Mercurio con la instrumentación científica más avanzada de la historia, para tomar tanto muestras del material que emite la estrella como imágenes de su actividad. El comportamiento del Sol tiene una relevancia mayúscula, no solo en el presente y futuro del clima en la Tierra, si no en actividades como las telecomunicaciones, los vuelos o los satélites, que se ven afectados continuamente por las tormentas solares y las partículas emitidas por el Sol. A pesar de ello, y como destaca Rodríguez Pacheco, hay partes del Sol que son desconocidas, como su interior y sus polos magnéticos. Está previsto que el lanzamiento de la nave se lleve a cabo en febrero de 2019 desde Cabo Kennedy. La Misión pretende colocarse en la órbita de Mercurio, ‘soportando’ más de 500 grados en una de sus caras. En datos completos, la misión podría llegar a durar 10 años.