La UAH se sitúa entre las universidades más comprometidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible, según el Impact Ranking 2020 de Times Higher Education
Esta es la segunda edición de este ranking, en el que han participado 766 universidades de 85 países, 32 de las cuales son centros españoles públicos y privados.
La UAH se sitúa entre las 300 mejores universidades del mundo en la clasificación general.
Times Higher Education, consultora educativa responsable de uno de los principales rankings de universidades del mundo, acaba de publicar los resultados de la segunda edición del Impact Ranking 2020, una clasificación que ofrece una visión global de la contribución de las universidades participantes para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas.
Si bien la Universidad de Alcalá ha estado presente en las dos ediciones, esta es la primera en la que participa en el ranking general, además de ser evaluada en 4 de los objetivos: ODS 4, Educación de calidad; ODS 5, Igualdad de género; ODS 11, Ciudades y comunidades sostenibles; y ODS 17, Alianzas para alcanzar los objetivos.
Los resultados obtenidos se ciñen a tres tipos de indicadores -investigación, divulgación y administración o gestión- y sitúan a la UAH como una de las universidades del mundo más comprometidas con los ODS. Está entre las 50 mejores universidades del mundo en Calidad de la Educación y entre las 100 primeras en Igualdad de Género. Además, se encuentra entre las 200 mejores en Alianzas para el Desarrollo Sostenible y en el grupo de las 300 primeras en Ciudades y Comunidades Sostenibles.
La Agenda 2030 en tiempos de COVID-19
El Impact Ranking 2020 evalúa las acciones que la Universidad de Alcalá ha venido realizando en los últimos tiempos y que han demostrado su contribución a los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Sin embargo, el contexto actual obliga a hacer una reflexión sobre el rol de la UAH en esa ‘nueva normalidad’ que habremos de construir en el futuro inmediato. La crisis en la que nos encontramos inmersos nos ha hecho ser conscientes de nuestra fragilidad, personal y colectiva, una fragilidad a la vez sistémica (todos nos hemos visto afectados), aunque asimétrica (no todos los sectores económicos y estratos sociales de la misma manera, no todos los territorios con la misma intensidad).
Además, ha puesto en el foco nuestra profunda interdependencia y la evidencia de que nadie va a salir solo de esto. Consecuentemente, surge ahora la necesidad de abordar las grandes debilidades desveladas por esta crisis: brecha digital, de género, de acceso a una vivienda y un empleo dignos, seguridad alimentaria para todos, incluso en nuestras sociedades desarrolladas; importancia de la sanidad, del sector de los cuidados y de otros sectores poco valorados que ahora hemos descubierto como básicos; desequilibrio sectorial y dependencias exteriores excesivas; importancia de la calidad del aire, del cuidado de la biodiversidad y los ecosistemas, de la ciencia, de las instituciones sólidas y transparentes para prevenir nuevas pandemias, etc.
Todo ello forma parte de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y de las aportaciones que la Universidad de Alcalá quiere seguir haciendo, en clave de resiliencia, para contribuir a nuestra reconstrucción después de este tsunami, convencida de que fortalecer los eslabones más débiles no solo nos hace mejores, sino que también beneficia al conjunto de la sociedad.