La invasión de especies en España es un problema que ocurre cada día con más frecuencia y, por lo general, no se toman medidas hasta que la especie extranjera está asentada en la Península. Por transporte de mercancías, escapes de animales o suelta intencionada, invasiones como la del mejillón cebra, el visón americano, el mapache o la cotorra argentina, se agravan cada día, convirtiendo a estas especies exóticas en una amenaza para la biodiversidad autóctona.

La avispa asiática (vespa velutina) es una de estas especies invasoras. Llegó a España en 2010 y el clima cálido de la región, apropiado para esta variedad, facilitó su asentamiento, según explica la profesora Díaz Aranda. Desde entonces, la expansión de esta avispa por el norte de la Península ha sido exponencial.

Aunque hay dos casos registrados de fallecimiento a causa de este insecto, uno de ellos en Galicia el mes pasado, ‘es importante enviar un mensaje de tranquilidad, puesto que ambos se produjeron por picaduras múltiples y de forma aislada. La picadura de esta variedad no es más grave que la del avispón autóctono (vespa crabro)’, recalca la profesora Díaz.

Sin embargo, a nivel ecológico y económico, el impacto de este insecto es alarmante. Es una variedad depredadora, y su mayor aporte proteico son las abejas. ‘En su zona de origen abejas y avispas asiáticas han evolucionado de forma paralela, y las abejas han desarrollado un mecanismo de defensa que consiste en formar una ‘bola de abejas’ alrededor de la avispa atacante, elevando la temperatura hasta que esta resulta mortal para la avispa’. Por desgracia, la variedad de abejas propia de la Península Ibérica no dispone de esos recursos, por lo que se produce ‘una pérdida considerable de individuos, con su consiguiente efecto en el sector apícola y en la polinización de nuestros ecosistemas’ explica la profesora. Además, en los meses de transición al otoño la avispa asiática demanda más hidratos de carbono, obtenidos de las frutas, por lo que este sector también se ve afectado.

Aunque es necesaria la eliminación de los nidos de avispa velutina, esta deben realizarla profesionales y la profesora Díaz Aranda recuerda las precauciones que se deben tomar: ‘se debe tener especial cuidado en zonas rurales o susceptibles de tener nidos con enjambres. No obstante las avispas solo atacan cuando defienden su nido, por lo que, en caso detectar uno, debemos alejarnos y avisar a las autoridades competentes para que procedan a su eliminación’.

Los nidos de la variedad asiática tienen el orificio de entrada en un lateral, mientras que la variedad autóctona tienen la apertura en la cara inferior. Es importante distinguir ambas variedades, porque ‘se está produciendo la eliminación de nuestro avispón sin sentido, ya que algunas personas los confunden’, reclama la profesora.

La avispa asiática tiene tonalidades oscuras hasta el final del abdomen, que es amarillo, en contraste con las típicas bandas amarillas y negras del avispón autóctono. Este, además, tiene coloraciones rojas en cabeza, tórax y abdomen.

Publicado en: Reportaje