‘He aprendido de los errores cometidos en el pasado, por eso ahora mi empresa funciona bien’

Rafael Vidal es AlumniUAH de  Ingeniería Técnica de Telecomunicaciones, cursó un Máster en Sistemas Electrónicos Avanzados, así como un postgrado en Bioingeniería y Telemedicina. Es todo un ejemplo de superación personal ya que sobrevivió al accidente aéreo de Spanair, una tragedia de la que sacó fuerzas para seguir adelante y montar su propia empresa: Indesmed, reconocida por fabricar y comercializar las muletas más ligeras del mundo.

- ¿Cómo fue su experiencia en la UAH?

La verdad es que ‘los telecos’ no vivimos tan bien como otras especialidades y nos toca estudiar bastante porque es una carrera especialmente dura, pero tengo muy buenos recuerdos.

- ¿Cuándo creó su propio negocio?

Fue en el año 2011. Tras acabar la carrera estuve trabajando en empresas del sector médico y cuando sufrí el accidente aéreo de Spanair, en el año 2008, tuve que reponerme de bastantes operaciones porque tuve fracturas importantes en la pierna y estuve mucho tiempo usando muletas. Siempre había tenido ganas de montar mi propia empresa, y a raíz de usar las muletas y otros aparatos de ortopedia, pensé que podría mejorarlos para que realmente estos aparatos médicos ayudasen a la gente. A partir de ahí, fruto de las ganas, de la idea y de la experiencia, surgió Indesmed.

- Anteriormente, ¿había trabajado para otras empresas?

Mi primer trabajo, nada más terminar la carrera, fue en una empresa que se dedicaba a la neurología, luego intenté una andadura por mi cuenta, pero la experiencia no me salió bien. He aprendido de los errores cometidos en el pasado, por eso ahora mi empresa funciona bien. Así, después de un par de fracasos y del accidente, decidí empezar otra vez con una nueva sociedad. Tanto los ingenieros, como cualquier profesión, debemos seguir intentándolo y no ver el fracaso empresarial como una derrota sino como una oportunidad de conocimientos para el futuro. De hecho, es la tercera vez que me embarco en un tema empresarial.

- Al usar usted mismo las muletas, imagino que vio las deficiencias que estas tenían…

Yo siempre he sido bastante creativo y usándolas me di cuenta de que no resolvían los problemas que tiene una persona que tiene que llevar muletas. Ahí empezó toda la andadura y, aunque yo soy ingeniero de especialidad electrónica, me surgió esta idea. Pensé qué se podía mejorar y por eso nuestras muletas están patentadas como las ligeras muletas del mundo. De hecho, somos muy reconocidos internacionalmente y hemos recibido un premio en la feria de Naidex, el mayor evento europeo de productos para la autonomía de personas con discapacidad por el diseño, operatividad y efectividad de nuestros productos, ya que ofrecemos muy buena calidad a un precio asequible.

Rafael Vidal
Rafael Vidal, AlumniUAH y fundador de Indesmed

- Háblenos un poco de su producto estrella, ¿qué características tienen las muletas que fabrican?

Tuve la idea de crear estas muletas con un material novedoso, lo último en este sector y que nadie lo estaba haciendo. Fuimos la primera empresa del mundo que fabricó muletas en fibra de carbono, lo que las hace muy ligeras, tanto que solo pesan como un teléfono móvil pero son capaces de soportar hasta 200 kilos y para una persona que las lleva todos los días, esto es muy importante, ya que una muleta convencional pesa entre 1 y 1.5 kg.

Por ello, a pesar de que ya llevan un tiempo en el mercado, siguen siendo un producto único. Además, cuidamos mucho la estética, algo que influye al paciente a nivel psicológico en su recuperación porque están creadas como un producto de deporte y no de rehabilitación, para que no te haga sentir todo el tiempo que estás mal, es como si fueran unos bastones para esquiar.

Esta invención nos ha ayudado a abrir un camino y a desarrollar una línea entera de productos que están orientados a las ayudas de todo tipo: andadores, bastones, hemos hecho una patente con gafas para presbicia y tenemos productos en marcha que involucran a la electrónica, que es mi especialidad. La empresa está creciendo, tenemos dos tipos de venta, una que es al cliente final a través de la tienda online y otra a través de distribuidores para llegar a todos los países del mundo, de hecho, los más importantes están en Corea y en Australia.

- ¿Qué le comentan las personas que usan sus productos?

La gente nos dice que le hemos cambiado la vida y eso nos llena de orgullo porque nosotros diseñamos el concepto, fabricamos el producto y lo llevamos a la realidad, pero al final son productos que ayudan a la gente a hacer su vida más liviana a quien lleva 20 años usando muletas. También hay muchos deportistas que las usan ya que se convierten en la extensión de tu cuerpo cuando las tienes que llevar todo el día.

- ¿Qué les diría a los alumnos que estén estudiando ahora y que quieran emprender una empresa?

Siempre me ha apetecido ponerme en contacto con alumnos no solo de ingeniería sino también de fisioterapia, una disciplina que tanto me ha ayudado. Yo les diría que no es un camino fácil, pero animaría al que le apetezca para que lo intente y que, si en algún momento tiene un fracaso, aprenda de ello y se lo tome como una experiencia positiva para el futuro. Desde luego, si uno tiene ganas, tiene que intentarlo. No es fácil, y por supuesto, en este momento no es nada sencillo, pero hay que intentarlo.

Publicado en: Entrevista