Castillejo del Bonete: unos yacimientos arqueológicos muy singulares en la provincia de Ciudad Real

Un equipo de especialistas en Arte Prehistórico de la Universidad de Alcalá, junto con  paleontólogos y expertos en fósiles jurásicos, colaboran en la documentación de las galerías subterráneas encontradas en Castillejo del Bonete, en la provincia de Ciudad Real.

 

Brazalete de arquero
Brazalete de arquero

El proyecto está dirigido por Luis Benítez de Lugo, profesor de la UAM. Los restos arqueológicos hallados permiten afirmar que éste fue un lugar funerario dotado con una alta carga simbólica, monumental y ritual, y han reavivado la hipótesis de que los que recibían sepultura en él podrían proceder de otros lugares y se desplazaban para oficiar sus enterramientos.

Primitiva Bueno, catedrática de Prehistoria de la Universidad de Alcalá y una de las investigadoras involucradas en el proyecto explica en qué consiste y la relevancia del yacimiento.

Pregunta: Profesora, ¿Cómo participa la Universidad de Alcalá en esta investigación? ¿Cuál es su interés? ¿Cómo se financia?
Respuesta: El Área de Prehistoria de la Universidad de Alcalá tiene una línea de investigación bastante potente en ‘Grafías Prehistóricas’. Desarrollamos protocolos y sistema de investigación relacionados  con las pinturas, los grabados y las esculturas de la Prehistoria, tanto en el Paleolítico como en el Postpaleolítico. Por eso fuimos invitados por el equipo que trabaja en Castillejo del Bonete, que es un yacimiento muy espectacular. Está formado por una serie de estructuras circulares con levantamiento de piedra donde se están localizando contextos funerarios. Es un sitio muy singular, ya que no hay dos como él conocidos hasta el momento. Además, se encuentra en una zona  de la Península Ibérica donde no existían datos de esa cronología (Ciudad Real). Forman parte de esta investigación muchos profesionales, tanto españoles como extranjeros, en un proyecto multidisciplinar, que incluye universidades y profesionales de otros ámbitos. El proyecto está subvencionado por la Junta de Castilla La Mancha, tiene el apoyo del Ayuntamiento de Terrinches, y participa también la empresa  de arqueología Antropos, que desde el principio reconoció el valor de este sitio.

 

P: Es decir, que confluyen varios elementos que lo hacen muy relevante. ¿Qué es lo que ustedes han hecho exactamente?
R: Hemos analizado los indicios de pintura y grabados que se asocian a las zonas donde hay depósitos funerarios. El yacimiento es un gran túmulo, es decir, una colina, que destaca en el sitio donde está, y en el centro hay una cueva natural. Bajando a la cueva se encuentran las distintas galerías, que han sido utilizadas para depositar restos humanos. En sus paredes hay indicios de pintura y grabados. Asociado a los restos humanos hay algunas estelitas, que son piezas de piedra que han sido talladas con forma humana. Y esto es lo que nosotros estamos investigando.

P: ¿Qué conclusiones están sacando?
R: La presencia de pintura en este contexto es completamente novedosa. No se conocía, y mucho menos de este estilo, que llamamos ‘Arte esquemático’.  Por otro lado la presencia de estelas remite a

Elementos foliáceos (puntas de flecha) y dentados
Elementos foliáceos (puntas de flecha) y dentados

una sistemática que conocemos en toda Europa, donde los restos humanos se suelen asociar a representaciones en piedra. Significa que, aunque el yacimiento que estamos explorando se halle en la provincia de Ciudad Real, tenía muchas relaciones con otros lugares de la Península Ibérica y de Europa, que le permitían estar al tanto de toda una serie de referencias rituales relacionadas con la muerte. Estamos hablando del Calcolítico y de la Edad del Bronce, porque otra ventaja que tiene Castillejo del Bonete es que en este yacimiento se han podido obtener fechas del carbono 14 a partir de restos humanos. Sabemos que estamos hablando de la segunda mitad del tercer milenio antes de la Era Cristiana.

P: Lo que se ha encontrado es realmente impresionante...
R: Así es, porque además de cerámica, que es más normal, hay metal, hay cobre, hay restos de madera, que parece increíble que se conserve, hay elementos de sílex de los que destaca su buena factura, hay también cuentas de collar de variscita, que es algo común en yacimientos del suroeste de la Península, pero no en otras zonas... Es decir, que todo lo que hay es muy llamativo por el sitio en el que aparece y por la calidad de su conservación. Incluso se conservan restos de marfil, que es un material que se conserva en poquísimas ocasiones.

 

 

Publicado en: Entrevista