Laura y María Lara Martínez, ex estudiantes de la UAH e historiadoras de referencia



Laura y María Lara Martínez
estudiaron Historia en la UAH. Las dos sacaron 38 matrículas de honor, recibieron el Premio Extraordinario de Licenciatura, fueron número uno de su promoción, obtuvieron el Primer Premio Nacional de Fin de Carrera en Historia y hace muy pocos días, el premio Algaba de Biografía, Autobiografía, Memorias e Investigaciones Históricas.

Actualmente estas hermanas mellizas trabajan en la Universidad a Distancia de Madrid (UDIMA), son escritoras y colaboran en programas de televisión como ‘La aventura del saber’, de Televisión Española. En los últimos meses han ingresado

Laura y María Lara Martínez.
como académicas correspondientes por Madrid en la Academia Andaluza de la Historia. Recientemente las hermanas alcarreñas han ganado el premio Algaba de Biografía, Autobiografía, Memorias e Investigaciones Históricas que convoca cada año El Corte Inglés y la editorial Edaf por el ensayo ‘Ignacio y la Compañía. Del castillo a la misión’.

-¿Qué recuerdos guardáis de vuestro paso por la UAH?
-María: Cursamos la licenciatura de Historia. Teníamos claro desde la época del Bachillerato que queríamos estudiar en la Universidad de Alcalá y dedicarnos a la docencia y a la investigación. Revivir en esta institución nuestra etapa universitaria tiene muchas connotaciones, incluidas las afectivas, ya que a nuestro abuelo Ángel le hacía mucha ilusión que estudiáramos aquí y murió días antes de que nosotras comenzásemos nuestra carrera. Cada vez que volvemos al Colegio de Málaga nos viene a la memoria el recuerdo de nuestro abuelo y la ilusión y las ganas con que comenzamos nuestros estudios con 17 años.

-De hecho, seguís en contacto con la UAH, ya que trabajáis con el grupo de investigación Frontera Global: Mediterráneo y Mundo Colonial, siglos XVI-XXI
-Laura: Sí, este grupo aborda los límites de las fronteras, no solo geográficas, sino también las mentales, culturales, económicas, sociales... en las Épocas Moderna y Contemporánea.
Por otro lado, nosotras somos directoras de otro grupo de investigación en nuestra universidad, que tiene por nombre ‘El espionaje en los siglos XVI-XX como experiencia de innovación educativa’, donde hemos incorporado a miembros de la UAH. Como le gusta decir a María, el historiador es un detective del pasado.

-Habéis continuado en paralelo también en vuestra trayectoria profesional…

-María: En este momento Laura es profesora de Historia Contemporánea y Mundo Actual en la UDIMA, donde también se ocupa de la coordinación de los cursos y pruebas de acceso a la Universidad para mayores de 25 y 45 años. Y yo soy profesora de Historia Moderna y Antropología y directora del Departamento de Historia y Humanidades. Lo cierto es que nuestra carrera docente e investigadora transcurre paralela, aunque cada una se especializó en un ámbito de conocimiento distinto.

-Lo cierto es que en los últimos tiempos os estáis convirtiendo también en un referente mediático en Historia…
-Laura: Dentro de esos sueños infantiles, la comunicación nos atraía mucho y eso nos ha hecho ocuparnos también de la transmisión del conocimiento. El Premio Uno fue nuestro primer contacto con los medios. Y luego, a través de las obras de literatura de María y los ensayos históricos de ambas, hemos mantenido contacto con los medios nacionales e internacionales. Y también con periódicos y las revistas especializadas, así como los programas de radio y televisión, como ‘La aventura del saber’. En la actualidad estamos desarrollando una serie sobre las monarquías en Europa, donde reflexionamos acerca de qué significa esta institución en el siglo XXI.

-Y también sois escritoras, aunque en distintas facetas. Habladnos de los libros y de su impacto.
-María: Sí, es cierto. Con ‘El velo de la promesa’ gané el Premio de Novela Histórica ‘Ciudad de Valeria’, que va por la 8ª edición;’ Memorias de Helena’ es la continuación. De las dos se han hecho eco medios de Reino Unido y USA, como la campaña America Reads Spanish, de promoción de la literatura en español, y el Real Colegio Complutense en Harvard, donde realicé estancias de investigación. En el género ensayístico he publicado numerosos libros, entre ellos ‘Brujas, magos e incrédulos en la España del Siglo de Oro’.
Con mi antología de versos, ‘Poemaría’ (2014) he puesto voz literaria a actos institucionales de lucha contra la violencia de género. Laura, por otra parte, se dedica al ensayo sobre Historia Contemporánea, es su época, la conoce como si hubiera vivido en ella desde sus inicios y, a veces, siente y habla como un espíritu decimonónico. El honor y la palabra son conceptos importantes para las dos. Ha tenido mucho éxito, coincidiendo con el Año del Greco, el libro de Laura titulado ‘El despertar de Toledo en la Edad de Plata de la cultura española’, así como sus conferencias en Atenas y en numerosas ciudades españolas, incluida la UAH, y composición de un panel sobre mi Tesis para una exposición en el toledano Museo del Greco.

-¿Qué futuro deparáis vosotras a las monarquías europeas?
-Laura: Es un asunto muy complejo, con diversas vertientes…Por un lado, desde el punto de vista de la legitimidad, es una institución que está afianzada en el Viejo Continente desde hace muchos siglos, hunde sus raíces desde el punto de vista legendario en la fundación de Roma (ab urbe condita) en el año 753 a.C. y ha ido perpetuándose con fórmulas lícitas o tan reprobables como el Absolutismo. En una sociedad como la nuestra, el mérito como recompensa al esfuerzo y al trabajo realizados deben permitir al ser humano ascender en la sociedad, frente a los arcaicos estamentos feudales, que en teoría fueron superados por las revoluciones con las que se inaugura la contemporaneidad. Las actuales monarquías de Europa son constitucionales, conviven con la democracia y, en consecuencia, sus titulares deben ejercer sus funciones con honestidad y profesionalidad, rindiendo cuentas a los ciudadanos que en este tercer milenio ejercemos como tales, pues ya no somos súbditos y sabemos que la sangre azul no existe.

-Una recomendación para los estudiantes de la UAH, de parte de dos brillantes alumnas ¿por qué los estudios de Humanidades?
-María: las Humanidades son un foco de cultura y un prisma desde el que mirar el mundo. Por tanto, permiten mejorar la sociedad. Las Humanidades aportan a cualquier profesional un sentimiento más cercano a la realidad, al entorno circundante y a la propia vida, pues en mi concepción pedagógica y en mi planteamiento de la existencia, la máxima del oráculo de Delfos: nosce te ipsum, conócete a ti mismo, está plenamente vigente. Los saberes teórico-prácticos son la columna vertebral del individuo, pero los afectos, los sentimientos y las emociones están fuertemente unidos a ese legado cultural que palpita a modo de alma colectiva del universo. Y eso intento conferir a todos mis libros y lecciones, partiendo del convencimiento, que pronuncio ya como lema, de que la Historia se construye desde el optimismo.
-Laura: Cuando acabamos los estudios de Bachillerato y la Selectividad, María y yo teníamos matrícula de honor, nota suficiente para hacer la carrera que deseáramos en cualquier universidad. Lo digo con suma humildad, porque fue fruto de un gran trabajo. Pero decidimos optar por lo que era nuestra vocación, nuestra gran pasión: la Historia. Yo creo que es fundamental que los estudiantes elijan por vocación, que no se dejen llevar por cantos de sirena. Dedicamos mucha parte de nuestra vida al trabajo, de modo que estar satisfechos con el entorno laboral es esencial para sentirnos en armonía y transmitirla a los demás. Todo proyecto se disfruta cuando se desempeña con ilusión. Y, por mi propia experiencia, puedo afirmar que la vocación hace la profesión.

Publicado en: Archivo antiguos alumnos