Un licenciado en Farmacia en la Dirección General de la Familia de la JCCM




Hugo Muñoz Claver
ejerce en la actualidad como Director General de la Familia en la consejería de Salud y Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha pero sus primeros pasos los dio en la UAH, donde se licenció en Farmacia.

No es nuevo para él ocuparse de asuntos relacionados con la sanidad y el bienestar social, porque antes de llegar a la Dirección General de la Familia ocupó cargos como delegado de Sanidad en Toledo y delegado provincial de Salud y Bienestar Social. Hugo Muñoz Claver cuenta en esta entrevista cómo recuerda su paso por la UAH y cómo ve la vida un licenciado en Farmacia ocupado en asuntos de gestión política.

Hugo Muñoz es el director general de la Familia de la consejería de Salud y Bienestar Social en la JCCM.


-Háblenos de su paso por la UAH, ¿cómo vivió la experiencia?
- Me licencié en Farmacia en la UAH en la promoción del 89-94 y fue una experiencia muy grata. Mis recuerdos son muy buenos por los compañeros, el profesorado y el trabajo que desarrollábamos en la propia facultad, con las prácticas en jornada de tarde de 2º a 5º y de mañana en 1º. En realidad, ha sido una de las épocas más bonitas de mi vida. Allí, además de aprender los conocimientos necesarios para ejercer de farmacéutico, crecí también como persona y como ciudadano y eso es algo que siempre llevaré a lo largo de mi vida.

-¿Cómo llega un licenciado en Farmacia a director general?
-La verdad es que no lo tenía planificado. Desde la oficina de farmacia se trabaja directamente con los ciudadanos tratando de ayudarles de una manera directa y cercana y esa es la manera en la que entiendo la política, hay que trabajar por los ciudadanos de esa forma y cuando me ofrecieron ser delegado de Sanidad de Toledo en el año 2002, año de las trasferencias sanitarias en Castilla-La Mancha, no lo dudé, y aunque era un trabajo duro creo que logramos poner la sanidad de la región en cotas muy altas. Posteriormente y con la fusión de las consejerías de Salud y Bienestar Social, pasé a estar un año siendo delegado provincial de las dos disciplinas hasta que el año pasado el consejero, Fernando Lamata, pensó en mí para ser director general de la Familia y en esas estamos.

-¿La política es saludable en estos tiempos que corren?
- Claro que sí, si no lo pensara así no estaría en política. El problema es que la imagen negativa que proyectan algunos políticos de estar más pendientes de sus cuitas personales y de partido que del ciudadano se ha generalizado a toda la clase política. Pero le puedo decir, por mi experiencia en el trato con muchos alcaldes, concejales, delegados, directores generales, consejeros o de mi propio presidente, que la inmensa mayoría tiene una clara vocación de servidores públicos. Tenemos que trabajar para el conjunto de la sociedad y trabajar con toda la sociedad, es decir, ir de la mano del ciudadano en la gestión diaria. Eso, en los tiempos que corren, es muy valorado.

-Tal vez la dirección general que usted ostenta es una de las que más satisfacciones da, aunque a día de hoy trabajar en bienestar social debe acarrear muchos problemas
-La sanidad, el bienestar social y la educación son una prioridad para el Gobierno de Castilla- La Mancha, junto con el empleo. De hecho, esta Consejería tiene en torno al 40% del presupuesto de la Junta y eso te permite dedicarte de manera plena y con recursos a quien más lo necesita. A diario, en esta Dirección General ves los problemas que tienen distintas familias y has de intentar dar soluciones, muchas veces ves cosas muy duras y complejas, pero creo que entre todos, políticos, funcionarios, a quien agradezco profundamente su labor, hemos sido capaces de poner la nota de humanidad que este trabajo necesita, generando una saludable y necesaria empatía con la gente y tratando de solucionar sus problemas; y cuando ves la sonrisa de un niño que ha pasado por un infierno y por fin está protegido, te compensa.

-¿Qué recomienda a los estudiantes?
- Trabajar y aprender, aunque también habrá tiempo para fiestas. Por cierto, no se si todavía están operativos los hangares para las fiestas de las facultades.
Y, en definitiva, en Farmacia nunca se termina de estudiar, hemos de reciclarnos constantemente y el primer paso es la Universidad. Aquí aprenderán las habilidades y las bases para toda una vida de estudio, para ser los buenos profesionales que la sociedad les va a demandar que sean y, aunque a veces, es duro, es también es un paso necesario y obligatorio.

Publicado en: Archivo antiguos alumnos