Desde la UAH, algunos consejos para no quedarse calvo



En un mundo gobernado por la imagen la alopecia provoca un problema cada vez más agudo a las personas que lo padecen, que son muchas: la alopecia androgénica afecta a más del 50% de los hombres y a prácticamente un 25% de mujeres a lo largo de la vida. El profesor de la UAH Sergio Vañó responde a algunas de las preguntas más frecuentes sobre este problema médico.

Sergio Vañó es profesor de la UAH, miembro del Grupo Español de Tricología y de la European Hair Research Society y coordinador de la Unidad de Tricología (área de la dermatología que se ocupa del estudio de la alopecia) y Estudio de las

Sergio Vañó.
Alopecias del Hospital Ramón y Cajal, unidad pionera en la Comunidad de Madrid que además presenta una Unidad de Trasplante Capilar Reconstructivo pionera en España.

Como señala el profesor de la UAH no hay un solo tipo de calvicie: ‘se trata de un problema médico que puede estar causado por múltiples causas, desde alteraciones hormonales, hasta problemas alimentarios, inmunológicos, fármacos, enfermedades internas e incluso algunas formas de cáncer, por ello es fundamental obtener un diagnóstico específico del tipo de alopecia para así poder seleccionar el tratamiento más adecuado’.

El primer mito que hay que destruir es que solo existe un tipo de alopecia. La más frecuente es la alopecia androgénica, en la que influyen factores genéticos y hormonales y afecta a hombres y a mujeres, pero hay más de 100 tipos, desde la alopecia areata (origen inmunológico), efluvio telógeno (origen múltiple: estrés, déficit de hierro, alteración de hormonas tiroideas...), alopecias cicatriciales primarias (origen autoinmune), alopecias inducidas por fármacos, alopecias secundarias a enfermedades sistémicas…

Segunda realidad evidente pero optimista: no hay producto milagro capaz de prevenir la alopecia androgénica, pero sí se puede tratar de forma precoz. ‘De hecho, el tratamiento médico (antiandrógenos, minoxidil) es efectivo en detener el curso de esta forma de alopecia, especialmente cuando se instaura en sus fases iniciales’, explica Vañó.

Otros tipos de alopecia como el efluvio telógeno pueden prevenirse llevando una vida y una alimentación saludable. Solo es cuestión de hábitos. Normalmente, la detección precoz es la clave, porque los tratamientos médicos en las primeras fases de la alopecia suelen ser efectivos y permiten detener o, al menos, ralentizar, la calvicie. ‘Se trata, además, de un tratamiento muy sencillo’, añade el profesor de la UAH.

Y la tercera cuestión a tener en cuenta: la calvicie no es solo una cosa de hombres. La alopecia androgénica afecta a más del 50% de los hombres y a prácticamente un 25% de mujeres a lo largo de la vida. En las mujeres suele comenzar con un ensanchamiento en la raya del pelo y, a pesar de que la incidencia es menor, el impacto emocional es mucho más intenso, tanto es así que puede afectar de forma relevante a su calidad de vida.

A continuación, un decálogo a cumplir cuando aparecen los primeros síntomas de calvicie:

1. No hay una sola alopecia: existen más de 100 tipos diferentes de alopecia, y es necesario un diagnóstico específico para seleccionar el mejor tratamiento.

2. En manos del especialista: la alopecia es un problema médico con un tratamiento médico efectivo. El dermatólogo es el especialista experto en problemas capilares.

3. La más frecuente, la androgénica: de origen genético y hormonal, no puede prevenirse, pero sí diagnosticarse precozmente.

4. Hay tratamiento: el tratamiento médico de la alopecia es efectivo en detener su avance e incluso en conseguir una mejora de densidad, pero debe mantenerse durante muchos años y el paciente debe ser constante.

5. El tratamiento quirúrgico, una opción fiable: el trasplante capilar es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que permite recuperar densidad capilar de forma totalmente natural. Se puede realizar tanto en hombres como en mujeres.

6. Trato normal del cabello: el uso de gominas, lacas, champú o tintes no es malo para el cabello y no produce que se caiga más el pelo.

7. Fuera tópicos: cortar el pelo corto no hace que crezca más fuerte.

8. Efectos adversos mínimos: en general, los tratamientos médicos para la alopecia son efectivos y muy seguros, con un riesgo de efectos adversos mínimo.

9. Las vitaminas no son un sustitutivo: la utilización de vitaminas puede mejorar el aspecto cosmético del pelo, pero no frena ningún tipo de alopecia, por lo que deben utilizarse como un complemento al tratamiento médico, pero nunca como un sustitutivo.

10. Un problema importante, que afecta a la calidad de vida: la alopecia puede producir un impacto negativo importante sobre la calidad de vida de los pacientes, por lo que debe dársele toda la importancia que tiene a nivel médico.